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En pleno corazón de Bogotá, una noticia ha generado nostalgia entre los amantes de la gastronomía: Colorado Panadería, uno de los locales más queridos de la ciudad, anunció su cierre definitivo. Su propuesta, basada en la cocina casera y en recetas que combinaban tradición y creatividad, había logrado fidelizar a un público diverso y exigente.
El establecimiento, ubicado en la Calle 66 con Carrera 4, se distinguía por platos icónicos como el pastel de pollo con salsa de chontaduro y el tamal relleno de papa criolla con guiso de chorizo, huevo frito y queso de oveja rallado.
A través de un comunicado en redes sociales, sus propietarios agradecieron a clientes, empleados y proveedores por acompañarlos en esta aventura culinaria.
Un proyecto nacido en plena pandemia
El origen de Colorado Panadería se remonta a la crisis sanitaria del covid-19, cuando el equipo del reconocido restaurante Mesa Franca decidió reinventarse. Crearon inicialmente una sandwichería con servicio a domicilio que, con el tiempo, evolucionó en un espacio que ofrecía desde sándwiches y sopas hasta amasijos, siempre con el sello de calidad que los caracterizó.
Esta capacidad de adaptación y su menú variado hicieron que el local se convirtiera en un punto de encuentro para quienes buscaban sabores auténticos y un ambiente acogedor, tal como señalan en el portal Buen Gusto.
Una propuesta que combinaba tradición y creatividad
Parte del éxito de Colorado Panadería residía en su habilidad para fusionar ingredientes locales con presentaciones innovadoras. Los platos más recordados combinaban técnicas clásicas con guiños a la cocina contemporánea, lo que le valió un lugar especial en la escena gastronómica bogotana.
Este enfoque creativo y el cuidado en la selección de productos generaron una clientela fiel, que ahora lamenta la pérdida de un espacio emblemático.
El cierre y los retos del sector
Aunque no se han revelado los motivos concretos del cierre, sus propietarios reconocen que la decisión refleja las dificultades que enfrentan los emprendimientos gastronómicos en un entorno económico cambiante. El caso de Colorado Panadería se suma a una lista creciente de negocios del sector que, pese a su popularidad, no logran sostenerse frente a los retos de costos, competencia y cambios en el consumo.
El legado de esta panadería queda en la memoria de sus clientes como un ejemplo de resiliencia y creatividad gastronómica en tiempos difíciles.
