

En Colombia, el Invima encendió las alarmas por varios suplementos dietarios vendidos como vitaminas o potenciadores "naturales". El organismo ordenó su retiro del mercado tras detectar en laboratorio la presencia de tadalafilo, un medicamento de uso controlado. Para usted, consumidor, el mensaje es directo: un producto anunciado como inocuo puede esconder un principio activo capaz de provocar ceguera o sordera súbitas.
El caso no es menor. Los lotes con anomalías pertenecen a marcas distribuidas en Colombia y comercializadas en tiendas físicas y plataformas digitales. La señal de alerta se multiplicó porque el compuesto hallado -el mismo que se usa para tratar la disfunción eréctil- tiene advertencias médicas sobre pérdida repentina de visión y audición cuando se usa sin control.
Estos son los productos señalados por el Invima
La alerta sanitaria identifica tres referencias: Vifer Max, Vifer-L y Vitafer-L Gold, todas asociadas al registro SD2023-0002470-R1, con muestras adquiridas en distribuidoras de Bogotá. Tras el análisis, el Invima ordenó su retiro inmediato e instó a dejar de consumirlos y a reportar cualquier punto de venta donde aún se ofrezcan.

El ingrediente no declarado es tadalafilo -un inhibidor de la PDE-5-: su presencia vuelve a estos "suplementos" medicamentos no autorizados. Por eso deben salir de circulación hasta nueva orden.
¿Por qué pueden causar pérdida de visión y audición?
No es que el "suplemento" por sí mismo cause el daño: el riesgo proviene del fármaco oculto. Las fichas técnicas y guías clínicas advierten que el tadalafilo se asocia -en casos infrecuentes- con neuropatía óptica isquémica anterior no arterítica (NAION) y con pérdida repentina de audición. La propia FDA estadounidense y recursos médicos recomiendan suspender el uso y buscar atención urgente ante cualquiera de estos síntomas.
Además, cuando un suplemento está adulterado con sustancias farmacológicas, se rompe la cadena de prescripción, seguimiento y contraindicaciones. Ese cóctel incrementa el peligro en personas con hipertensión, cardiopatías, antecedentes de ictus o que toman nitratos, entre otros escenarios clínicos. Por eso los reguladores clasifican estos productos como fraudulentos y los retiran de circulación.
Cómo identificar un suplemento seguro (y denunciar a tiempo)
Primero, verifique que el empaque tenga registro sanitario vigente del Invima y que coincida con el producto consultado en la base pública. Desconfíe de promesas "milagrosas", combos de oferta en redes y etiquetas en las que se oculten ingredientes bajo "mezclas propietarias". Si tiene dudas, no consuma: reporte en las líneas oficiales del Invima y guarde fotos de la etiqueta y del lote para seguimiento.
Si usted ya los tomó y presenta síntomas como visión borrosa, zumbido o pérdida de audición, dolor torácico o mareo, acuda de inmediato a urgencias y mencione el posible consumo de tadalafilo. Las guías clínicas recomiendan interrupción inmediata y valoración oftalmológica y otorrinolaringológica temprana.

Un problema global con "suplementos" adulterados
Los retiros en Estados Unidos y Canadá muestran un patrón: "suplementos" de mejora sexual contaminados con sildenafil o tadalafilo se venden online y en tiendas, pese a ser medicamentos con receta. Cada año la FDA publica retiros por este motivo, y advierte que estos productos no pueden comercializarse como suplementos. Esta experiencia internacional es clave para Colombia: lo que pasa afuera suele repetirse en nuestros canales digitales.













