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La diputada del PRO Silvia Lospennato puso la mira en el Parlamento del Mercosur, más conocido como Parlasur. Advirtió que la elección directa de los parlamentarios tendría un costo fiscal cercano a los $ 5000 millones. También alertó sobre el pago de las dietas de los 43 parlamentarios, que se encuentra judicializado.
"Convocaron a la elección directa de parlamentarios del Mercosur. Un delirio descomunal: 43 parlamentarios para hacer recomendaciones", tuiteó la diputada bonaerense la semana pasada.
Fue luego de que a través del Boletín Oficial, el Poder Ejecutivo oficializara el calendario electoral, con la elección de los parlamentarios del Mercosur incluida. Se trata del organismo creado en el año 2006 que tiene la facultad de hacer recomendaciones, resoluciones y propuestas al Consejo del Mercado Común.
Días antes de la publicación del decreto presidencial, en la última sesión que celebró la Cámara baja, la referente del PRO ya había alertado sobre el impacto fiscal del mecanismo de selección de los miembros de un organismo.
"Que la ciudadanía sepa que no podemos darnos el lujo en esta situación de la Argentina en seguir generando y financiando estos cargos; de gastar entre $ 3000 mil y 5000 millones en convocar a esta elección, más lo que le va a costar a este Parlamento sostener las dietas de 40 parlamentarios durante los próximos cuatro años para cumplir una función consultiva del Mercosur", justificó desde su banca en aquel debate, al pedir un apartamiento del reglamento para votar su proyecto de ley que apunta a suspender la elección directa de los parlamentarios.
En su proyecto de ley, que no logró que sea debatido en la sesión, Lospennato fundamenta que el "único país que elegiría a sus representantes de forma directa sería Argentina".
¿Cómo funciona en Uruguay, Paraguay, Brasil y Venezuela? "Le dan esa función a los diputados o senadores que ya tienen y punto", explicó en su cuenta de Twitter. Esos legisladores no cobran un extra por ser parlamentarios.
Ahora bien, si la Argentina sostiene la elección directa, tal cual alerta Lospennato, el Estado debería destinar un monto que podría rondar los $ 5000 millones para financiar las campañas para la categoría nacional y la regional. El cálculo también contempla los costos de las boletas.
Si bien el Poder Ejecutivo ya convocó a las elecciones para los miembros del Parlasur (junto con las PASO y las Generales), Lospennato aseguró a El Cronista que "perfectamente se podría mediante una ley del Congreso suspender este dislate económico".
El costo de las dietas
Lospennato también pone la mira en el pago de las dietas de los parlamentarios que, por ley, equivalen a las de un diputado nacional. En este sentido, la diputada cercana a Horacio Rodríguez Larreta recordó que en el año 2016, durante el gobierno de Mauricio Macri, el Poder Ejecutivo decidió no pagar esas dietas.
El planteo en ese entonces fue que lo que correspondía era que la Argentina transfiriera los fondos al Mercosur y que fuera el Parlasur el encargado de afrontar ese gasto, básicamente porque los parlamentarios no son empleados del Estado argentino.
Tras la decisión del gobierno de Cambiemos, el parlamentario del por entonces Frente para la Victoria, Alejandro Karlen, inició una causa judicial para que el Congreso de la Nación afronte el pago de las dietas. El caso, hoy, se encuentra en manos de la Corte Suprema.
Ahora bien, si el Máximo Tribunal falla a favor de Karlen, el Congreso (con fondos del Estado nacional) debería pagarles a los 43 parlamentarios sus dietas de manera retroactiva. Una suma millonaria. En el 2020, Karlen logró cobrar por, orden de la justicia, $ 8 millones.
"El juicio ya lo había ganado. Ahora salió la ejecución de condena. Así que el Estado debe pagarme. Mi dieta es la misma que la de un diputado nacional, la única diferencia es que me pagarán los cuatro años juntos", explicó el correntino en marzo del 2020.
Durante el gobierno de Cambiemos, la propuesta de Macri era que "los mismos diputados y senadores que ya nos representan lo hagan en el Parlasur, como es de práctica en Brasil y en Uruguay", por que "cuesta una fortuna mantener el gasto innecesario que significa generar un nuevo cuerpo de representantes en el Parlasur en cada elección".














