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A la hora de comprar un coche usado o de segunda mano, son varios los gastos que se deben considerar. Si bien, quienes están en tema, suelen tener todos los requisitos los presentes, es habitual que no se tome en cuenta un impuesto.

Ese en particular, genera un gasto extra al realizar la transacción, y es importante no pasarlo por alto.

Coches usados: cuál es el impuesto que debes considerar a la hora de comprar

El tributo en cuestión es el impuesto de transmisiones patrimoniales (ITP), que, como su nombre indica, se debe abonar al comprar cualquier bien patrimonial o de carácter privado.

Dado que el coche se considera tal, al adquirir un vehículo de segunda mano de un particular también se debe abonar este impuesto. La parte de que debe hacerse cargo de ello es la compradores. En cambio, en una operación de este tipo no hay que pagar el IVA.

Cómo calcular y cuánto cuesta el ITP

Calcular el ITP resulta algo complicado, ya que requiere tener y consultar las tablas de valoración de vehículos usados de Hacienda, actualizadas al año en el que se realice la transferencia.

Pero para tener una idea, cuanto menos aproximada, se puede realizar la cuenta. En el Boletín Oficial del Estado (BOE) se publica la tabla con el valor fiscal del coche nuevo (con menos de 1 año). Allí deberían estar todas las marcas, modelos y versiones.

A este valor hay que aplicarle el siguiente porcentaje dedepreciación, según los años de uso del modelo. A mayor antigüedad, más depreciación y menos habrá que pagar:

  • Hasta 1 año: 100%
  • Más de 1 año, hasta 2: 84%
  • Más de 2 años, hasta 3: 67%
  • Más de 3 años, hasta 4: 56%
  • Más de 4 años, hasta 5: 47%
  • Más de 5 años, hasta 6: 39%
  • Más de 6 años, hasta 7: 34%
  • Más de 7 años, hasta 8: 28%
  • Más de 8 años, hasta 9: 24%
  • Más de 9 años, hasta 10: 19%
  • Más de 10 años, hasta 11: 17%
  • Más de 11 años, hasta 12: 13%
  • Más de 12 años: 10%

Automáticamente, con esta cuenta, se tendrá el valor mínimo del coche para Hacienda. Este valor es el que hay que utilizar para aplicar el porcentaje que se debe pagar a Hacienda como ITP, que varía según la comunidad autónoma donde se resida. El tributo va desde un 4% de Madrid o Murcia, por ejemplo, hasta un 8% de Galicia o Cantabria.