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En los últimos años, la digitalización del trabajo ha difuminado los límites entre la vida personal y la profesional. Las aplicaciones de mensajería, las notificaciones móviles y el teletrabajo han hecho que un mensaje fuera del horario laboral pueda prolongar la jornada más allá de lo establecido en España.

Para poner freno a esta práctica, el Estatuto de los Trabajadores ha reconocido de forma expresa el derecho a la desconexión digital. El objetivo es el de proteger el descanso y la intimidad de los empleados y reforzar esa diferencia entre vida profesional y personal.

El Real Decreto Legislativo 2/2015, de 23 de octubre, recoge en su artículo 20 bis el derecho a garantizar la intimidad en el uso de los dispositivos digitales y prohíbe al empresario imponer disponibilidad por fuera del horario laboral. Mediante esta Ley, se considera ilegal exigir que se atiendan llamadas, correos o mensajes una vez finalizada la jornada.

Los derechos laborales que permiten la desconexión digital

En el texto, el Real Decreto infiere en que "los trabajadores tienen derecho a la intimidad en el uso de los dispositivos digitales puestos a su disposición por el empleador, a la desconexión digital y a la intimidad frente al uso de dispositivos de videovigilancia y geolocalización en los términos establecidos en la legislación vigente en materia de protección de datos personales y garantía de los derechos digitales".

Esto significa que el derecho también se extiende al teletrabajo y a los modelos híbridos, donde el límite entre la oficina y el hogar se desdibuja incluso más. Si la empresa incumple con la desconexión, el trabajador puede negarse a responder sin sufrir represalias, o bien acudir al comité de empresa y, en última instancia, a la Inspección de Trabajo para hacer valer su derecho.

Además, cualquier control que la empresa tenga sobre las herramientas de trabajo, como puede ser una laptop, debe estar regulado a través de una política interna clara y justificada.

Cuáles son las sanciones para las empresas que no respeten la desconexión digital

En caso de que la empresa incumpla con alguna parte de la normativa, el trabajador puede negarse a responder solicitudes fuera de su horario laboral. En última instancia, el empleado puede acudir a la Inspección de Trabajo con prueba de las irregularidades para denunciar a su empresa.

La ley contempla sanciones económicas para las compañías que ignoran la obligación de respetar la desconexión digital. Las multas pueden variar entre los750 euros y los 7500 euros en función de la gravedad, las pruebas presentadas y el tamaño de la organización.

El objetivo de este respaldo legal es garantizar un equilibrio real entre vida personal y laboral al evitar que la conectividad permanente pueda perjudicar la salud y el bienestar de los trabajadores.

Las consecuencias psicológicas del teletrabajo excesivo

Según los datos de un estudio realizado por el grupo psicológico Unobravo y recopilados por Infobae, el 45% de los trabajadores a distancia considera que la principal ventaja de esta modalidad es mejorar el equilibrio entre vida personal y laboral. Sin embargo, otro 21% considera que su bienestar mental se ha visto afectado negativamente.

Para este segundo grupo es que la directora clínica de Unobravo, Fiorenza Perris, ha dado una serie de recomendaciones para mejorar esta experiencia. La primera de ellas consiste en establecer una rutina fija: "Define horarios fijos de trabajo, programa pausas y marca el fin de tu jornada para evitar el agotamiento. Una rutina diaria mejora el sueño, la concentración y el equilibrio emocional".

Otro factor esencial es mantener la conexión social. Para ello, la experta aconseja combatir la soledad con encuentros virtuales o reuniones regulares con los equipos de trabajo.

Por último, el movimiento también puede ser fundamental: "Moverse regularmente mejora el estado de ánimo, reduce la ansiedad y favorece la claridad mental. Intenta incorporar caminatas breves o estiramientos".