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El uso de papel higiénico podría estar en sus últimos días y el impacto de este cambio es más profundo de lo que parece. Hoy se enfrenta una nueva realidad y este elemento de "higiene" podría desaparecer, no por falta de suministro, sino por razones ambientales.

Durante la pandemia, muchos se sorprendieron de la escasez de un bien que no era de primera necesidad: el papel higiénico. Así, sin que los usuarios se dieran por aludidos, se convirtió en un bien codiciado y su escasez generó escenas insólitas de estanterías vacías y consumidores llenando los carritos de supermercados.

Según datos de Greenpeace y el Consejo de Defensa de los Recursos Naturales, una gran cantidad de papel higiénico proviene de pulpa virgen extraída de bosques en Canadá y Europa. Esta práctica no solo contribuye a la tala de árboles, sino que también reduce la capacidad de los bosques para captar carbono.

Adiós al papel higiénico tradicional en supermercados: descubre cómo será a partir de ahora

En España, el consumo promedio de papel higiénico por persona asciende a 81 rollos anuales, lo que conlleva una considerable demanda de fibra virgen, especialmente en las versiones "premium" de varias capas. A pesar de la existencia de alternativas más sostenibles, como el papel higiénico reciclado o elaborado con fibras de bambú, su disponibilidad en el mercado español es limitada.

Adicionalmente, el proceso de fabricación implica el uso de productos químicos blanqueadores, que generan subproductos tóxicos y contaminan el agua y el aire, aunque en niveles inferiores a los de épocas anteriores.

Para quienes buscan opciones más sostenibles, algunas marcas ofrecen productos certificados por el Forest Stewardship Council (FSC), que aseguran un menor impacto ambiental, aunque ciertos expertos advierten que esta certificación no garantiza el uso exclusivo de fibras recicladas.

Países como Túnez, Marruecos, Egipto y Jordania, han comenzado a reducir su dependencia del papel higiénico, optando por métodos más sostenibles y eficaces de limpieza personal. Muchos profesionales de la salud sugieren considerar alternativas como el bidet o sistemas de limpieza con agua y jabón, que aseguran una higiene más efectiva.

Japón, reconocido por su liderazgo en higiene personal, emplea sistemas de lavado con agua en lugar de papel higiénico. Estos métodos, además de ser más eficaces en la limpieza, contribuyen a prevenir problemas de salud asociados al uso de papel higiénico. Aunque su uso pueda resultar incómodo en espacios públicos, estos sistemas podrían marcar el inicio de una nueva era en los baños, tanto públicos como privados.

¿Qué es el bidet y en qué países se utiliza en lugar del papel higiénico?

En respuesta a esta situación, numerosos países han propuesto e implementado el uso del bidet. Este dispositivo de baño ha alcanzado una notable popularidad en diversas naciones, especialmente en Europa y América del Sur, donde se encuentra comúnmente en los hogares.

El bidet es un artefacto sanitario diseñado para la limpieza de las áreas íntimas del cuerpo mediante el uso de agua. Usualmente se instala adyacente al inodoro y dispone de un chorro de agua que proporciona una limpieza más eficaz y delicada que el papel higiénico.

  • Italia
  • Francia
  • España
  • Portugal
  • Grecia
  • Argentina
  • Uruguay
  • Japón (con inodoros de alta tecnología que incluyen funciones de lavado)
  • Brasil
  • Chile
  • Paraguay