

La Comunidad de Madrid prevé reintroducir al lince ibérico el próximo año, con la suelta de varios ejemplares en el Monte del Pardo. Así lo ha informado el consejero de Medio Ambiente, Interior y Agricultura, Carlos Novillo.
Se trata de una especie legendaria de la zona. Según este, aunque las negociaciones con Patrimonio Nacional se están desarrollando de manera exitosa, todavía no se sabe quién se hará cargo del coste económico de esta propuesta.
El plan para reintroducir al lince ibérico

El plan para la reintroducción de esta especie autóctona de la región, que llegó a estar en peligro crítico de extinción, se inició en 2022.
Tal y como anunció la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en el Debate del Estado de la Región, y se preveía que se llevase a cabo el pasado año,pero finalmente se ha retrasado hasta 2025.
No obstante, desde el gobierno local se están elaborando informes y trabajando para encontrar un hábitat apto para su supervivencia desde 2018.
Por qué en el Monte Pardo

Su introducción en el Monte del Pardo se debe principalmente a las características del mismo, ya que se trata de un espacio aislado y seguro, donde dispondrá de presas de las que alimentarse.
El lince es una especie autóctona de la Península y ya se ha llevado a cabo su reintroducción en otras áreas como la Cuenca Alta del Manzanares y el suroeste de Madrid.
La primera vez que se vio un lince en la Comunidad de Madrid desde hace 30 años fue el pasado año. Concretamente, fue visto por un vecino de la localidad madrileña de Sevilla la Nueva, cuando se le cruzó mientras iba en su vehículo.
El conductor logró grabar imágenes del animal que pronto se difundieron en redes sociales. En julio del pasado año, también Agentes Forestales de la Comunidad localizaron a otro ejemplar de esta especie en Boadilla del Monte.
El lince ibérico ya no está en peligro de extinción
En junio de este año la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) confirmó que el lince ibérico había dejado de ser considerada una especie en peligro de extinción y pasaba a ser una "especie vulnerable".
Se trata de uno de los animales más amenazados de las últimas décadas en la zonay lleva recuperándose desde 2015. Andalucía y Castilla-La Mancha son las comunidades que mayoritariamente acogen a este animal.















