

Según un estudio de la Sociedad Española de Neurología (SEN), el 48% de la población adulta y el 25% de la población infantil del país no tienen un sueño de calidad.
Es por eso, que despertarse a mitad de la noche, más conocido como padecer de insomnio, puede tener consecuencias en la salud y también interfiere con las actividades diarias, al generar somnolencia durante el día.
Por su parte, el National Heart, Lung & Blood Institute han asegurado que el insomnio es un trastorno frecuente del sueño, que puede ser causado por estrés o por cambios de horarios o de entorno.
Además, detallan que puede afectar la memoria y la concentración. Y en el tiempo, aumenta el riesgo de tener presión arterial alta, cardiopatía isquémica, diabetes y cáncer.

En cuanto a su diagnóstico, el proveedor de atención médica posiblemente le pregunte sobre sus hábitos de sueño. A su vez, entre los posibles tratamientos puede que le recomiende hábitos de un estilo de vida saludable como un horario de sueño regular, terapia cognitivo conductual para el insomnio y medicamentos para ayudarle a manejar el insomnio.
Problemas del sueño: cómo saber si padezco de insomnio
El portal Mayo Clinic, comunicó que los síntomas del insomnio pueden incluir los siguientes:
- Tener dificultades para conciliar el sueño a la noche.
- Despertarse durante la noche.
- Despertarse mucho antes de tiempo.
- Sentirse cansado o con sueño durante el día.
- Sentirse malhumorado, depresivo o ansioso.
- Tener dificultades para prestar atención, concentrarse en las tareas o recordar.
- Cometer más errores o tener más accidentes.
- Preocuparse constantemente por el sueño.
Insomnio: qué se puede hacer para prevenirlo

Según el mismo portal médico, estos hábitos para un buen descanso pueden ayudar a prevenir el insomnio:
- Ve a la cama y despiértate a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana.
- Haz actividad física. Hacer actividad física con regularidad puede llevar a tener un buen descanso a la noche.
- Limita las siestas o no duermas siesta directamente.
- Limita o evita la cafeína, el alcohol y la nicotina.
- No comas mucho ni bebas demasiados líquidos antes de ir a dormir.















