


El juez Arturo Zamarriego ha aceptado a trámite la querella presentada por el exportavoz de Sumar Íñigo Errejón contra la actriz Elisa Mouliaá por las declaraciones públicas que realizó después de denunciarle por agresión sexual.
En el auto de admisión, que convoca a ambos a declarar el próximo 17 de febrero a la misma hora, el magistrado señala que los hechos descritos por el político permiten presumir un posible delito de calumnias.

La decisión llega en un momento en el que Errejón ya figura procesado por la supuesta agresión sexual en otra causa instruida por un juzgado de Madrid. Esta misma semana trascendió que la defensa de Elisa Mouliaá solicitó al juez Adolfo Carretero la apertura de juicio oral contra el exlíder de Sumar en Madrid.
En la querella la abogada Eva Gimbernat alude al contenido de varias publicaciones en redes sociales en las que Mouliaá acusó a Errejón de extorsionar a dos testigos de la causa que se sigue en el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid, cuyo titular procesó recientemente a Errejón por un delito de abuso sexual del antiguo Código Penal (actualmente agresión sexual).
Estos dos testigos son los dueños del piso en el que se celebró una fiesta el 8 de octubre de 2021 en la que ocurrieron los hechos denunciados, quienes declararon que la que era su amiga en aquel momento les presionó luego, una vez denunciada la presunta agresión sexual en 2024, para que validasen su versión en el juzgado. Uno llegó a bloquearla y contactó con Errejón para decirle que su situación le parecía “injusta”.
Tras esas declaraciones Mouliaá reaccionó en la red social X “difundiendo afirmaciones falsas y difamatorias sobre el señor Errejón respecto de la relación de éste con dichos testigos” e “imputándole falsamente un delito de extorsión para que testificaran a su favor”, dice la querella por presunto delito de calumnias con publicidad.
Así detalla el contenido de 14 mensajes publicados el pasado 21 de junio y el número de visualizaciones que alcanzaron.

En uno de ellos la actriz cita una noticia sobre las declaraciones de los testigos y dice: “No. Errejón se negó a entregar su móvil porque había extorsionado a dos de mis testigos. No inventéis la realidad”.
“Lo fuerte es que sabiendo que Errejón no ha querido entregar su móvil y que ayer uno de mis dos testigos a los que extorsionó confesó haber estado hablando con el acusado… ¿Cómo es posible que se lancen estas noticias? Si es un discurso automáticamente NULO! No valen esos testigos. Automáticamente están contaminados”, explica en otra publicación.
Añade que el otro testigo escribió, de ‘motu proprio’, un correo a Errejón porque discrepaba de lo que contaba Elisa Mouliaá y consideraba que Errejón sufría “un linchamiento” y “una injusticia”, tras lo que mantuvieron una breve conversación por WhatsApp a iniciativa del testigo, sin que Errejón le indicara nada sobre lo que debería declarar.
“Elisa Mouliaá Ruiz de Elvira actuó ilícitamente, con el único fin de difamar, menoscabar el honor, destruir la credibilidad y honorabilidad de Iñigo Errejón Galván, imputándole falsamente la comisión de un delito de extorsión respecto de dos testigos”, solo porque “declararon la verdad de lo sucedido esa noche”, concluye la querella.
Fuente: EFE