

La Comisión Europea (CE) abrió un nuevo capítulo en la crisis diplomática con Israel al proponer la suspensión de las preferencias comerciales y la imposición de sanciones a dos de sus ministros más radicales, Bezalel Smotrich e Itamar Ben-Gvir.
Según explicó la institución, la decisión responde al "rápido deterioro de la situación humanitaria en Gaza tras la intervención militar de Israel, el bloqueo de la ayuda humanitaria, la intensificación de las operaciones militares y la decisión de las autoridades israelíes de avanzar en el plan de asentamientos en Cisjordania".
Ursula von der Leyen, presidenta de la CE, fue contundente: "Los horribles acontecimientos que tienen lugar en Gaza a diario deben cesar. Es necesario un alto el fuego inmediato, el acceso sin restricciones de toda la ayuda humanitaria y la liberación de todos los rehenes retenidos por Hamás".

Qué implican las medidas de Bruselas
De prosperar, las medidas supondrían la suspensión de ventajas arancelarias que afectan al 37% del comercio entre la UE e Israel, con un valor estimado de 5800 millones de euros. Además, se congelarían los bienes que Smotrich y Ben-Gvir pudieran tener en territorio comunitario y se les prohibiría la entrada a la Unión.
La propuesta deberá contar con el respaldo de una mayoría cualificada de Estados miembros para aplicarse. En paralelo, Bruselas también ha planteado sanciones contra colonos israelíes violentos y miembros de Hamás.
Israel amenaza con respuestas contundentes
Desde Jerusalén, el rechazo fue inmediato. El ministro de Exteriores, Gideon Saar, advirtió de que "Israel continuará luchando, con la ayuda de sus amigos en Europa, contra los intentos de dañarla mientras está inmersa en una guerra existencial". Y agregó: "Las medidas contra Israel serán respondidas en consecuencia, y esperamos no tener que recurrir a ellas".
Saar calificó de "moral y políticamente distorsionadas las recomendaciones del Consejo de Comisarios liderado por la presidente Von der Leyen" y alertó de que "las acciones contra Israel perjudicarán los intereses de la propia Europa".
España también prepara un embargo de armas
En este escenario, el ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, confirmó que "es cuestión de días la aprobación del decreto ley de embargo de armas a Israel".
Albares, durante un viaje de Estado a El Cairo, defendió que España es "de lejos" el país del mundo que más hace por Palestina y respondió a las críticas que acusaban al Gobierno de electoralismo.

"Puede haber gente que piense que se podía ir más rápido o que se podía hacer alguna cosa más, bienvenida cualquier idea para hacer alguna cosa más", añadió.
Con las sanciones en debate en Bruselas, la amenaza de represalias israelíes y un embargo español en camino, la tensión entre la UE e Israel escala a niveles inéditos en medio del conflicto de Gaza.















