Todo país que cuenta con un mercado de capitales desarrollado logra tener una herramienta clave para el financiamiento privado y público. A la falta de dicha herramienta, las necesidades que no logren ser cubiertas con el mercado local deberán ser satisfechas con capitales del exterior. Entre las distintas causas y eventos que explican la falta de un mercado de capitales local, la falta de una tasa de interés real en Argentina es una de las mas importantes.

Desde el Grupo SBS entienden que difícilmente pueda estimularse el ahorro interno cuando las tasas de interés que enfrenta el inversor promedio ni siquiera alcanzan a compensar la elevada inflación .

“Desde el punto de vista del ahorrista la tasa de interés real mide el retorno que se obtiene luego de descontar el impacto de la inflación, siendo esta una medida de la ganancia o pérdida de la inversión en términos del poder de compra del dinero prestado. En el caso argentino, remarcamos que en la mayor parte de la historia económica de los últimos 15 años las tasas de interés reales para quienes realizaron depósitos a plazo fijo terminaron siendo negativas en un 5,6% promedio por año, con más de 5 períodos en los que se superó el 10% , comentaron.

Haciendo un balance de los últimos eventos financieros y económicos en Argentina, los analistas consideran que, recientemente quedó claro que muchos de los problemas que viene sufriendo el país podría haber tenido un impacto sustancialmente menor en presencia de un mercado de capitales local mucho más desarrollado.

“Un ejemplo claro son las elevadas necesidades de financiamiento del sector público y la imposibilidad de cubrirlas localmente cuando el ahorro doméstico es tan bajo, factor que explica la brusca corrección que sufrió la cuenta corriente cuando se cerró el financiamiento externo y la necesidad del gobierno de recurrir al FMI. Sin embargo, no se puso igual énfasis en las causas detrás del subdesarrollo del sistema financiero local y las bajas tasas de ahorro doméstico , comentaron.

Mirando hacia adelante, desde la compañía consideran que, en la medida en que el ahorrista promedio no pueda obtener un retorno mayor que la inflación por sus depósitos, será muy difícil recrear la confianza en la moneda local y estimular el ahorro doméstico, extendiendo una de las grandes debilidades estructurales de la economía argentina y manteniendo bajos niveles de inversión y una excesiva dependencia del financiamiento externo.

Según el análisis de Grupo SBS, queda claro que los periodos de tasa de interés real positiva han sido muy breves y por lo tanto el ahorrista no ha podido ni sabido ganarle a la inflación, desestimulando el ahorro interno y generando un escollo importante para el desarrollo del mercado local. De revertir este proceso, los resultados sobre el volumen del ahorro local probablemente serán radicalmente opuestos.