

Un grupo de investigadores del Swiss Light Source descubrió una tercera forma de magnetismo, hasta ahora desconocida por la ciencia. Denominada "altermagnetismo", esta revelación redefine principios básicos de la física y abre el camino hacia innovaciones tecnológicas con gran potencial.
Sensores más eficientes, memorias ultrarrápidas y ordenadores cuánticos de última generación son solo algunos ejemplos de las aplicaciones que podrían surgir de este descubrimiento.
El estudio, difundido en la revista Nature, tomó por sorpresa a la comunidad científica y marca el inicio de un nuevo capítulo en la comprensión de la física.
Científicos descubren una tercera forma de magnetismo: el altermagnetismo
Un equipo de investigadores identificó una tercera forma de magnetismo, denominada altermagnetismo, que se une a las ya reconocidas formas ferromagnética y antiferromagnética.

Historicamente, la distinción entre estas formas de magnetismo radicaba en la manera en que se orientan los espines electrónicos.
En el ferromagnetismo, todos se alinean en la misma dirección y generan un campo magnético intenso, mientras que en el antiferromagnetismo los espines se orientan de forma opuesta, anulando el magnetismo en conjunto.
Por el contrario, el altermagnetismo presenta una disposición alternativa de los espines, donde cada uno se alinea en dirección opuesta a su vecino. A diferencia del antiferromagnetismo, esta disposición no resulta en la cancelación del magnetismo, sino que genera alineaciones activasque responden de manera sensible al flujo de energía.
¿Cómo fue el descubrimiento?
Mediante el uso de rayos X altamente precisos en el Swiss Light Source (SLS) en Suiza, los investigadores analizaron una muestra de telururo de manganeso, un material generalmente identificado como antiferromagnético.
En el transcurso del examen, se observó una sucesión alterna en los niveles de energía de los estados de espín opuestos, confirmando así que el telururo de manganeso no encaja en la clasificación convencional de ferromagnetismo o antiferromagnetismo, sino que se encuentra dentro otra categoría identificada como altermagnetismo.
El altermagnetismo: una nueva oportunidad para la espintrónica
Este hallazgo representa un avance clave, no solo en lo teórico, sino también en sus posibles aplicaciones.
En la última década, los científicos han buscado nuevas formas de registrar información. Aunque la tecnología electrónica actual, basada en la carga de electrones, funciona bien, presenta limitaciones importantes.
Aquí entra la espintrónica, una alternativa que aprovecha tanto la carga como el espín del electrón para almacenar y procesar datos. No obstante, su desarrollo se había frenado por la falta de materiales adecuados, un obstáculo que el altermagnetismo podría ayudar a superar.















