

El próximo miércoles 7 de mayo la Capilla Sixtina en el Vaticano tendrá la primera reunión con los 133 purpurados que tiene como misión la elección del nuevo sucesor de San Pedro en el trono de Dios en la Tierra. Suena fuerte pero así lo dice la tradición católica.
Entre los 133 cardenales que se reunirán en el cónclave para elegir al nuevo papa que llegará para continuar las tareas de liderazgo de la Iglesia católica que lleva a cabo el papa Francisco, se encuentra el cardenal argentino Ángel Rossi.

El cardenal Ángel Rossi, el argentino jesuita que podría seguir el legado del papa Francisco
El purpurado cordobés es uno de los cuatro cardenales argentinos que eligen al nuevo Papa y surge la pregunta, ¿repetirá Argentina el papado teniendo en cuenta el legado de bondad, amor, unidad, comunicación e igualdad que dejó el papa Francisco?
El cardenal Ángel Rossi, como lo fue el papa Francisco, también es jesuita y maneja un perfil bajo.
Declarado como un fiel seguidor de las enseñanzas y ejemplos de amor del papa Francisco, el purpurado argentino hace parte de los cardenales que podrían ser el nuevo papa. ¿será el nuevo Papa de la Iglesia católica y se llamará Francisco II? falta poco para saber la respuesta.

¿Quién es el cardenal Ángel Rossi que estará en el cónclave?
El cardenal Ángel Sixto Rossi es un sacerdote jesuita argentino, nacido en Córdoba en 1958. A secas, el cardenal Ángel Rossi ingresó a la Compañía de Jesús en 1976 y fue ordenado sacerdote en 1986.

El purpurado se formó en Filosofía y Teología en la Universidad del Salvador en Buenos Aires y se especializó en espiritualidad en Roma. Es conocido por su labor pastoral y social, especialmente en la asistencia a personas en situación de vulnerabilidad a través de fundaciones solidarias.
En 2021 fue nombrado arzobispo de Córdoba por el papa Francisco y, en 2022, creado cardenal. Rossi se destaca por su cercanía con la gente, su lenguaje sencillo y su compromiso con los valores evangélicos de justicia y compasión.
Es autor de varios libros sobre espiritualidad ignaciana y ha sido reconocido por su capacidad para tender puentes entre sectores diversos de la sociedad argentina. Su lema episcopal es "Consolad, consolad a mi pueblo".















