

Tomar la decisión de casarse es uno de los pasos más importantes en la vida de una pareja. Sin embargo, psicólogos alertan sobre ciertas actitudes que, si bien pueden parecer pequeñas al principio, pueden deteriorar la relación con el tiempo y generar vínculos tóxicos o disfuncionales.
En este sentido, un grupo de especialistas publicó una lista de comportamientos considerados "señales rojas" en relaciones, los cuales deberían advertirte antes de tomar cualquier paso a futuro. Detectarlos a tiempo puede ayudar a evitar un compromiso que más adelante se vuelva insostenible.
Aquí te compartimos cuáles son, y por qué es mejor pensar dos veces antes de decir "sí, acepto".
Las señales de alarma que no deben ignorarse
Uno de los primeros signos de alerta es la crítica constante. Cuando uno de los dos solo se enfoca principalmente en lo negativo del otro, sin reconocer lo bueno, puede instalarse una dinámica de juicio que debilita la autoestima y genera resentimiento. Esta actitud desgasta, y con el tiempo destruye la conexión emocional.
Otro comportamiento preocupante es el desprecio o burla hacia el otro, ya sea en privado o en público. Psicólogos señalan que el sarcasmo hiriente, los gestos de fastidio o los comentarios despectivos son muestras de falta de respeto y empatía, factores claves para una relación sana.

También, se destaca como peligrosa laactitud defensiva permanente, donde una de las partes no acepta errores y convierte cualquier crítica en un ataque. Esto impide el diálogo y la resolución de conflictos, generando distancia emocional y frustración.
La indiferencia emocional: una amenaza silenciosa
Otro punto crítico es la evasión o el "muro de piedra", que ocurre cuando uno de los miembros de la pareja se desconecta por completo de la conversación, evita hablar de los problemas o simplemente ignora al otro. Esta actitud no solo evita la solución de conflictos, sino que crea un ambiente de frialdad emocional.
Sumado a esto, los especialistas advierten sobre el control excesivo o la manipulación. Quien intenta controlar a su pareja, ya sea mediante celos, aislamiento o chantaje emocional, está construyendo una relación desigual y potencialmente abusiva.
Finalmente, laincapacidad de asumir responsabilidad emocionales otro gran obstáculo. Cuando una persona no reconoce el impacto de sus acciones o minimiza el daño que genera, la relación pierde la capacidad de evolucionar.
¿Qué hacer si detectas estas actitudes en tu relación?
Los especialistas recomiendan no ignorar estas señales y buscar acompañamiento psicológico si se presentan con frecuencia. Muchas veces, estas actitudes no cambian con el tiempo, sino que se intensifican con la convivencia y las exigencias del matrimonio.
Casarse con alguien que presenta estos hábitos puede tener consecuencias negativas para la salud mental y emocional a largo plazo.
Por este motivo, identificar estas señales y actuar con conciencia puede marcar la diferencia entre una vida en pareja estable y una relación conflictiva sostenida en el tiempo.















