

El Instituto Internacional de Estocolmo para la Investigación de la Paz (SIPRI), reconocido por su labor en el análisis del gasto militar mundial, ha revelado que, durante el año 2023, las naciones invirtieron una cifra récord: 2,44 billones de dólares (aproximadamente 2,27 billones de euros) en defensa.
Este monto representa un incremento del 6,8% en comparación con el año anterior.
El panorama internacional, caracterizado por crecientes tensiones y conflictos, ha propiciado un aumento sin precedentes en el gasto militar a nivel global. El análisis del desembolso de cada país y su relación con el Producto Interior Bruto (PIB) permite entender la prioridad que una nación otorga a sus capacidades militares, conocido como "carga de defensa".

Naciones con el menor presupuesto destinado a Defensa
El promedio mundial de gasto militar en relación con el PIB se situó en el 2,3% en 2023. El Reino Unido se alinea con esta media, con un desembolso de 74.900 millones de dólares (unos 69.600 millones de euros).
En contraste, el gasto en defensa de Sudáfrica representó el 0,7% de su PIB (2.800 millones de dólares), Austria el 0,8% (4.400 millones de dólares), Nueva Zelanda el 1,2% (3.000 millones de dólares), Canadá el 1,3% (2.700 millones de dólares) y Alemania el 1,5% (66.800 millones de dólares).
El informe del SIPRI califica el aumento del gasto militar como "sin precedentes". En el extremo inferior de la tabla, Haití destaca como la nación con el menor porcentaje de su PIB destinado a defensa, apenas un 0,1%. Esta exigua inversión, evidentemente, se relaciona con la grave crisis de seguridad y el colapso del orden público que azotan al país caribeño.
Junto a Haití, otras naciones con un gasto militar notablemente bajo en relación con su economía son Irlanda y Mauricio, ambas con un 0,2% de su PIB dedicado a defensa en 2023. Irlanda ha mantenido históricamente una postura de neutralidad, mientras que Mauricio es una nación insular sin fuerzas armadas significativas.
Otras potencias y regiones también muestran variaciones en su inversión militar en relación con su economía. Australia destinó el 1,9% de su PIB (32.300 millones de dólares), Francia el 2,1% (61.300 millones de dólares) y Taiwán el 2,2% (16.600 millones de dólares), una cifra que podría considerarse modesta dada la constante amenaza de una posible invasión por parte de China.
India superó ligeramente la media mundial con un 2,4% de su PIB (83.600 millones de dólares), mientras que Singapur demostró un compromiso significativamente mayor con su defensa, invirtiendo el 2,7% de su PIB (13.200 millones de dólares).
El informe del SIPRI pone de manifiesto la creciente priorización de la defensa a nivel global, un fenómeno directamente vinculado a la inestabilidad del panorama geopolítico y las tensiones entre diversas naciones. El aumento récord en el gasto militar durante 2023 subraya la preocupación generalizada por la seguridad y la preparación ante la disparada de una eventual Tercera Guerra Mundial.
Las naciones con los ejércitos más poderosos, preparadas para una Tercera Guerra Mundial
Ucrania: 36,7% del PIB ($64.800 millones, unos 60.300 millones de euros)
El ranking de las 5 naciones con mayor inversión del presupuesto en Defensa lo encabeza Ucrania con un total del 36,7% del PIB, es decir, unos 64.800 millones de dólares (aproximadamente 60.300 millones de euros) en 2023. Esta situación se debe a la invasión rusa, que ha generado un considerable gasto para el país desde el punto de vista financiero.
Sudán del Sur: 6,3% del PIB ($1.100 millones, unos 1.000 millones de euros)
El gasto militar de Sudán del Sur experimentó un incremento extraordinario en 2023, disparándose en un 106% hasta superar la marca de los 1.000 millones de dólares (aproximadamente 930 millones de euros). Según el SIPRI, este aumento drástico en el presupuesto de defensa se ha visto directamente impulsado por "la escalada de la violencia interna y los problemas de seguridad derivados de la guerra civil en el vecino Sudán".
Líbano: 8,9% del PIB ($241 millones, unos 224,1 millones de euros)
En segundo lugar se encuentra Líbano, el cual incrementó su gasto militar en un 10% durante el año 2023, alcanzando los 241 millones de dólares (aproximadamente 224,1 millones de euros). Sin embargo, esta cifra representa una fracción considerable del desembolso anual típico de la nación a finales de la década de 2010, que se situaba en torno a los 2.500 millones de dólares (unos 2.300 millones de euros).
Argelia: 8,2% del PIB ($18.300 millones, unos 17.000 millones de euros)
En un escenario regional marcado por la histórica disputa con Marruecos, Argelia incrementó su gasto militar durante el 2023. Esta decisión se produce en un contexto de apoyo continuo de Argelia al Frente Polisario, el movimiento que lucha contra la ocupación marroquí en el Sáhara Occidental.
Arabia Saudí: 7,1% del PIB ($75.800 millones, unos 70.500 millones de euros)
Arabia Saudita, uno de los mayores inversores en defensa a nivel mundial, experimentó un ligero incremento en su gasto militar durante el año 2023. El desembolso total ascendió a 75.800 millones de dólares, un aumento marginal en comparación con los 75.000 millones de dólares registrados en 2022.













