

Cuando una persona se queda sin trabajo, puede hacer un retiro parcial por desempleo desde su cuenta Afore. Es una opción legal, pero poco se habla de las consecuencias: cada retiro disminuye tu ahorro y las semanas cotizadas ante el IMSS, lo que puede impedirte acceder a una pensión más adelante.
Menos semanas, menos dinero, más años trabajando
El IMSS descuenta semanas cotizadas en proporción al monto que retires. Y sin esas semanas, no podrás cumplir los requisitos mínimos para jubilarte.
Lo más grave es que esas semanas sólo se recuperan si reintegras el dinero retirado, algo que pocos hacen.
Los fraudes también están al acecho
Actualmente, se detectó una práctica peligrosa: gestores externos inflan tu salario para simular un despido, cobrar una comisión de hasta el 30% y ayudarte a retirar más dinero de tu Afore. Pero en realidad, te dejan con menos semanas cotizadas y menor ahorro, lo que te obliga a trabajar más años o quedarte sin pensión.
Un caso que lo explica todo
Imagina esto: tienes 43 años, 520 semanas cotizadas y un salario promedio de 13,758 pesos. Un gestor te promete retirar 34,000 pesos de tu Afore, pero te cobra 10,000 pesos de comisión.
Resultado: pierdes ahorro, semanas y el derecho a pensionarte, porque no alcanzarás las 1,000 semanas requeridas en el futuro.
¿Qué dice la ley?
La reforma que se discute en el Senado busca frenar estos abusos y también combatir decisiones impulsivas que muchos trabajadores toman por necesidad o falta de información.
El objetivo es proteger tu futuro financiero y evitar que termines sin pensión por buscar un alivio momentáneo.

¿Por qué importa esto?
Porque si retiras hoy sin entender el impacto, puedes quedarte sin pensión mañana.
Y si pasas de los 65 años sin alcanzar las semanas necesarias, es muy probable que no encuentres empleo formal ni ingresos estables.
Antes de usar tu Afore como un salvavidas temporal, piensa en el futuro. Podrías estar hipotecando tu retiro. Infórmate, evita fraudes y toma decisiones con visión de largo plazo.











