

El chisme, a pesar de su mala reputación, podría ser una herramienta poderosa para fortalecer las relaciones amorosas.
Un reciente estudio publicado en el Journal of Social and Personal Relationship sugiere que compartir información sobre otras personas no solo es una práctica común entre parejas, sino también beneficiosa para la vida en pareja que fomenta la confianza y la intimidad.
La investigación, realizada por Chandler Spah y Megan Robbins, analizó las conversaciones diarias de 76 parejas, tanto heterosexuales como homosexuales, para cuantificar el tiempo que le dedican a "chismosear".
Los resultados revelaron que, en promedio, las parejas pasaban unos 38.40 minutos al día hablando de alguien más. El estudio también encontró variaciones interesantes: las parejas de mujeres chismearon más que las heterosexuales, y estas, a su vez, superaron a las de hombres.
Por qué es importante compartir chismes con tu pareja
Dedicar un tiempo a compartir chismes con la pareja mejora la calidad de la relación y aumenta la felicidad. Esto se debe a que el chisme fomenta un sentido de complicidad y pertenencia, reforzando la idea de que "están en el mismo equipo".

Esta actividad compartida contribuye a una mayor comunicación, un mejor entendimiento y un fuerte compromiso con el bienestar del otro. Además de los beneficios emocionales, el chisme actúa como un vehículo para el vínculo emocional. Los investigadores sostienen que hablar sobre conocidos mutuos o historias de redes sociales permite a las parejas sentirse más conectadas y cómodas al compartir sus experiencias.
El estudio incluso ofrece ejemplos concretos de cómo el chisme puede beneficiar a una pareja. Hablar mal de alguien después de una fiesta, por ejemplo, puede indicar un lazo más fuerte y exclusivo entre los miembros de la pareja. Por otro lado, compartir noticias positivas sobre otros puede prolongar los momentos de alegría y diversión, contribuyendo a un ambiente más positivo.















