"Este año será récord en presentación de proyectos de vivienda promovida", al superar las 260 iniciativas ingresadas, por encima de las 245 registradas durante 2024, una cifra que fue el máximo histórico desde la puesta en marcha de este régimen en 2011, explicó el director ejecutivo de la Asociación de Promotores Privados de la Construcción del Uruguay (Appcu), Aníbal Durán.
El empresario destacó el diálogo "muy fluido" que existe con el ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone, a quien definió como "el ministro con más diálogo con la cámara de la construcción en 35 años".
Para Durán el ministro "está ávido de inversión" y busca que el sector privado aporte unos 12 mil millones de dólares este año para alcanzar una expansión del Producto Bruto Interno cercana al 2,5%.
"Nos pidió colaboración y seguimiento de los proyectos. Incluso se interesa por algunos que enfrentan trabas administrativas, como uno de 30 millones de dólares en Maldonado que está pendiente de aprobación en la Junta Departamental", dijo Durán en declaraciones a Radio Monte Carlo.
El dirigente empresarial destacó que la planilla de obreros directos en la construcción ronda los 57 mil, un nivel que calificó como "estructural y no coyuntural". Por esta razón, dijo que desde el año 2021 se registra un "crecimiento sostenido" lo que consideró "un número muy digno para la industria y todo indica que seguirá en ascenso".
Trabas burocráticas en Montevideo
De todas formas, Durán alertó sobre los retrasos en los permisos de construcción en la Intendencia de Montevideo que generaron frustración de algunos proyectos inmobiliarios. "Hay un cuello de botella en el piso quinto, donde se tramitan los permisos. Literalmente hay casos que demoran más de un año. El capital es cobarde: si no hay certezas, se va a otro lado", señaló.
En ese sentido, adelantó que la próxima semana la cámara de la construcción tiene prevista reunirse con el intendente de Montevideo, Mario Bergara, para conversar sobre estas demoras.
Como contrapartida, el empresario sostuvo que los departamentos de Maldonado y Canelones mantienen una dinámica "ágil" en materia de habilitaciones. "Queremos que se comprenda que detrás de cada proyecto hay millones de dólares y cientos de puestos de trabajo. No pedimos prioridad, pero sí eficiencia", dijo Durán.
