

Uno de los cambios más importantes en el mundo financiero está por ocurrir. MasterCard, una de las administradoras de pagos más grandes del mundo, anunció que implementará un cambio radical en sus tarjetas de crédito y débito.
La modificación implica la eliminación de los números tradicionales de 16 dígitos, lo que tendrá un impacto en la seguridad y funcionalidad de los plásticos utilizados por millones de clientes.
¿Desde cuándo cambian las tarjetas de débito y crédito MasterCard?
Este cambio se realizará de manera progresiva y se espera que para el año 2030 todas las tarjetas estén adaptadas a este nuevo sistema. La decisión responde a la necesidad de aumentar la seguridad de las transacciones y reducir el riesgo de fraude, un problema que ha crecido exponencialmente con el auge de los pagos digitales.

¿Cómo funcionarán las nuevas tarjetas de MasterCard sin números?
Para reemplazar los tradicionales 16 dígitos, MasterCard utilizará tecnologías avanzadas como la tokenización y la autenticación biométrica. Estas innovaciones mejorarán la seguridad y privacidad de los usuarios al momento de realizar pagos.
La tokenización es un sistema que sustituye la información sensible de la tarjeta por un código único llamado token. Este código no puede ser reutilizado ni robado por ciberdelincuentes, lo que reduce drásticamente el riesgo de fraude.
¿Cómo funcionan las nuevas tarjetas de MasterCard?
Al realizar una compra, en lugar de enviar el número de tarjeta, se genera un token único específico para esa transacción.
Este token es procesado por MasterCard y el banco emisor, sin exponer la información real del usuario.
Si un hacker intercepta el token, no podrá reutilizarlo, ya que solo funciona para la transacción para la que fue creado.
Los comercios almacenarán solo tokens en sus bases de datos, eliminando el riesgo de filtraciones de datos financieros.

Cambian las tarjetas: ¿Cómo afectará a los clientes?
Si bien la eliminación de los números en las tarjetas de crédito y débito representa un cambio, los usuarios podrán seguir utilizando sus tarjetas con normalidad en tiendas físicas y plataformas digitales. Sin embargo, contarán con una mayor protección contra fraudes y un nivel de seguridad más avanzado en cada transacción.
Este cambio significa que algunas tarjetas actuales podrán quedar obsoletas y ser rechazadas en cajeros automáticos y terminales de pago que no estén actualizados al nuevo sistema. Es importante que los usuarios consulten con su banco para conocer los plazos y detalles sobre la renovación de sus tarjetas.














