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En un esfuerzo por proteger la integridad de su sistema migratorio, Estados Unidos intensificó la vigilancia sobre los matrimonios entre ciudadanos y extranjeros. El llamado "fraude matrimonial", cuando una pareja se casa únicamente con fines migratorios, no solo es un delito federal, sino también una de las causas más graves de sanciones y deportaciones.
Con medidas cada vez más estrictas, las autoridades buscan detectar vínculos conyugales simulados y aplicar consecuencias legales tanto a ciudadanos como a inmigrantes que intenten burlar la ley.
¿En qué consiste el fraude matrimonial?
El fraude matrimonial en el contexto migratorio de Estados Unidos es un delito que ocurre cuando una persona contrae matrimonio con un ciudadano o residente permanente únicamente con el propósito de obtener beneficios migratorios, como una Green Card (residencia permanente), y no existe una verdadera relación conyugal.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS) reconoce los siguientes tipos de fraude:
- Pago a un ciudadano estadounidense para que se case con un extranjero
- Un ciudadano estadounidense se casa con un extranjero para hacerle un favor
- Un extranjero hace creer al ciudadano estadounidense que el matrimonio es legítimo
- Matrimonio por encargo
¿Cómo se detecta el fraude matrimonial en Estados Unidos?
No todos los matrimonios entre ciudadanos y extranjeros se presumen fraudulentos, pero el USCIS exige pruebas sólidas de que el matrimonio es real y fue celebrado de buena fe. Las entrevistas conjuntas, evidencia de convivencia y fotos familiares son parte del proceso habitual para demostrar legitimidad.
Sin embargo, las autoridadesinvestigan cada solicitud de residencia basada en matrimonio. Algunos indicadores de posible fraude incluyen:
- Vivir en domicilios separados
- No tener una vida en común (finanzas, viajes, hijos, etc.)
- Inconsistencias en entrevistas o documentos
¿Cuáles son las penas para quienes cometen fraude matrimonial en Estados Unidos?
La ley criminal de Estados Unidoscontempla los siguientes castigos para quienes cometen algún tipo de fraude de matrimonio:
- Denegación de la residencia o ciudadanía
- Deportación del inmigrante
- Multas y hasta 5 años de prisión para ambos implicados si se comprueba que el matrimonio fue simulado
- Inhabilitación para futuros beneficios migratorios
