

La reina emérita Sofía de Grecia y Dinamarca, madre del actual monarca Felipe VI, atraviesa un momento de salud que genera inquietud en su entorno. A sus 86 años, la exmonarca española estaría siendo monitoreada por el equipo médico de la Casa Real debido a una adicción que arrastra desde su juventud: el consumo de tabaco.
Si bien durante muchos años logró mantenerse alejada del cigarrillo, en los últimos meses habría recaído, situación que estaría agravando su estado clínico y preocuparía a toda su familia, en especial a Felipe VI.
Esta preocupación se intensificó luego de que la reina Sofía sufriera una infección respiratoria que la mantuvo alejada de los compromisos oficiales donde, según trascendió en medios españoles, los médicos habrían vinculado este cuadro con los efectos acumulativos del tabaco en su sistema respiratorio.
Preocupación en la Corona Española: la adicción al cigarrillo que afecta a la reina Sofía
Según el libro Doña Sofía, escrito por los periodistas Carmen Enríquez y Emilio Oliva, la madre del rey llegó a fumar hasta diez cigarrillos por día durante su juventud, pero en su adultez intentó dejar este hábito por completo. Sin embargo, ciertas situaciones personales la habrían empujado nuevamente a fumar, entre ellas, destacan el fallecimiento de su hermano Constantino de Grecia y el deterioro de salud de su hermana Irene.

Su esposo, el rey emérito Juan Carlos I, es conocido por su gusto por los puros, y según registros históricos, incluso Alfonso XIII, tatarabuelo de Felipe VI, era un fumador habitual. Esta tendencia en la familia Borbón-Glücksburg generó durante años un entorno permisivo, pero la avanzada edad de la reina y sus problemas respiratorios habrían marcado un punto de inflexión para sus médicos y allegados.
La Corona Española preocupada por la salud de la reina Sofía
La infección respiratoria que afectó a la reina Sofía generó una fuerte alarma entre los profesionales médicos de la Casa Real. Aunque se recuperó sin complicaciones graves, el episodio dejó en evidencia el daño que el tabaco habría provocado en su organismo tras más de medio siglo de consumo.

En este contexto, el equipo médico le había recomendado con insistencia que abandonara el cigarrillo de manera definitiva, algo que no habría logrado hasta el momento. Según fuentes cercanas al Palacio de la Zarzuela, incluso trabajadores del entorno real habrían alertado a Felipe VI sobre la situación, preocupados por el deterioro físico de su madre.












