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La partida de Marisa Paredes, quien falleció a los 78 años en Madrid el 17 de diciembre de 2024, ha dejado una profunda huella en la cultura española.
Se trata de una figura del entretenimiento reconocida mundialmente por su elegancia natural y su pasión por las artes. Asimismo, la actriz madrileña no solo dejó su marca en el cine, sino también en el teatro, donde comenzó su carrera.
¿De qué murió Marisa Paredes?
Su inesperado fallecimiento, a causa de un problema coronario, ha sacudido el mundo audiovisual. A lo largo de su carrera, Paredes se destacó por su trabajo con grandes directores como Pedro Almodóvar, Arturo Ripstein y Agustí Villaronga.
Marisa Paredes actriz fue ingresada en el Hospital Fundación Jiménez Díaz de Madrid tras sentirse indispuesta, y su muerte fue inesperada. La histórica intérprete fue una de las musas más importantes del cine de Almodóvar, participando en películas icónicas como Entre tinieblas (1983); Tacones lejanos (1991); La flor de mi secreto (1995); Todo sobre mi madre (1999) y La piel que habito (2011).
Su relación con el director manchego fue fundamental en su carrera, como ella misma expresó en diversas entrevistas: "Almodóvar fue un más allá en mi vida".
No es solo Almodóvar: ¿Con qué otros directores trabajó Marisa Paredes?
Además de su vínculo con Almodóvar, Marisa Paredes dejó una marca indeleble en el cine mexicano, trabajando con Arturo Ripstein en Profundo carmesí y El coronel no tiene quien le escriba, basadas en obras de Gabriel García Márquez.
Su participación en proyectos internacionales, como El espinazo del diablo (2001) de Guillermo del Toro y Ópera prima (1980) de Fernando Trueba, amplió su legado, llevándola a los grandes escenarios del cine mundial.
Su partida ha marcado el final de una era para el cine y teatro español, pero su influencia perdurará en la memoria colectiva. En su despedida, el Teatro Español de Madrid le rendirá homenaje el próximo miércoles. La gran dama del cine español, que tanto luchó por la cultura y la libertad, siempre será recordada.
