En esta noticia

China continúa su avance en tecnología militar con la modernización de su flota submarina. Uno de los desarrollos más preocupantes para las potencias occidentales es el submarino nuclear Type 094A, una versión mejorada de la clase Jin, armado con misiles balísticos JL-3 capaces de portar múltiples ojivas nucleares y alcanzar objetivos intercontinentales.

El "Destructor de Ciudades" cuenta con un poder de aniquilación inmenso y la capacidad de permanecer casi invisible a los sistemas de detección.

La capacidad de lanzar ataques sorpresivos y devastadores desde el mar podría cambiar la manera en que se diseñan las estrategias de defensa en los próximos años.

¿Qué es el submarino nuclear Type 094A?

El Type 094A es un submarino de propulsión nuclear desarrollado por China como parte de su estrategia de disuasión estratégica. Pertenece a la clase Jin y representa una evolución respecto a sus versiones anteriores, al incorporar mejoras en su estructura, mayor capacidad de sigilo y nuevos sistemas de lanzamiento de misiles.

En este sentido, se estima que puede operar a profundidades considerables durante semanas sin ser detectado, lo que lo convierte en una amenaza constante en aguas internacionales.

¿Qué características tiene el misil JL-3?

El JL-3 (Julang-3) es un misil balístico intercontinental lanzado desde submarinos (SLBM, por sus siglas en inglés), y representa el último avance del arsenal nuclear chino. Tiene un alcance estimado de más de 10.000 kilómetros, lo que le permite alcanzar objetivos en Estados Unidos o Europa desde aguas cercanas al territorio chino.

Asimismo, puede estar equipado con múltiples ojivas nucleares independientes (MIRV), lo que incrementa su capacidad destructiva y su efectividad contra sistemas antimisiles.

¿Puede ser detectado por los sistemas actuales?

Una de las principales preocupaciones de Estados Unidos y sus aliados es que el Type 094A cuenta con mejoras significativas en su capacidad de sigilo acústico. Aunque no es tan silencioso como los submarinos nucleares estadounidenses o rusos, ha reducido considerablemente su firma sonora, dificultando su localización.

Las patrullas navales y los sistemas de seguimiento submarino han tenido dificultades para rastrearlo, lo que lo vuelve más eficaz como plataforma de ataque nuclear encubierto.