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Uno de los ejércitos protagonistas y más sanguinarios de la Segunda Guerra Mundial planea volver a la primera plana: el Gobierno de Alemania aumentó considerablemente la inversión en su ejército y buscará codearse con las grandes potencias militares.

Desde hace un tiempo que Alemania ha activado un plan para transformar radicalmente su política de defensa. Esto lo llevó a elevar en grandes cantidades su inversión en el plano militar con un gasto de 88.500 millones de dólares para 2024, un incremento del 28% respecto del año anterior.

A partir de esa cifra, Alemania se posiciona como el cuarto país en todo el mundo con mayor gasto en defensa y superó a muchas otras potencias tradicionales. Es en ese marco que el gobierno germano ya trazó su hoja de ruta completa hasta 2029 y se espera que el gasto en defensa ascienda a más de 100 mil millones de euros para ese año.

Vuelve el ejército más sanguinario de la Segunda Guerra Mundial

De concretarse el aumento estipulado en las proyecciones oficiales, Alemania superaría ampliamente los gastos ejecutados por Francia y el Reino Unido. De esta manera, no sólo acercará posiciones con las principales potencias, como Rusia, China y Estados Unidos, sino que se consolidará como el principal ejército europeo.

Estas decisiones del ejército alemán se llevan a cabo por la preocupación generada por factores externos, como la amenaza constante de Rusia o la incertidumbre política en Estados Unidos. Parte del gasto, además, contempla una ayuda financiera a Ucrania en su lucha contra Vladimir Putin.

El nuevo desafío de Alemania: un ambicioso plan de rearme para Europa

El rearme alemán se genera en un contexto en el que la violencia entre estados se recrudece y nace nuevamente como una forma de dirimir los conflictos más importantes en materia diplomática: la guerra entre Rusia y Ucrania, el conflicto en la Franja de Gaza y los recientes bombardeos entre Estados Unidos e Irán, entre otros.

Si bien las autoridades se han mantenido prudentes en sus declaraciones respecto de este ambicioso proyecto, varios analistas consideran que no es una exageración referirse a un conflicto de escala global que podría desatarse repentinamente en los próximos años.