En esta noticia

Antes de partir, el Papa Francisco dio una conferencia donde habló de los valores de la Iglesia y del mundo. Además, reveló cuál es "el tesoro más valioso del mundo" para la Iglesia católica e instó a otorgarle la importancia que merece.

Quien en ese entonces oficiaba como líder máximo del Vaticano ofreció una charla titulada "Amémoslos y protejámoslos" en la Sala Clementina y se mostró conmovido al hablar de las condiciones del mundo, especialmente al afirmar que "no se puede dejar de mirar a los ojos a los más frágiles y no escuchar sus silencios, gritos y llantos".

El objeto más valioso en la historia de la Iglesia Católica

En su discurso, el papa Francisco afirmó que "en realidad, nada tiene más valor que la vida de un niño" y subrayó que "no es aceptable lo que hemos presenciado casi a diario en tiempos recientes: niños que mueren bajo las bombas, sacrificados a los ídolos del poder, de la ideología y de los intereses nacionalistas".

La escena fue más que elocuente: los niños presentes en la conferencia le entregaron a Francisco dibujos y un mensaje en nombre de los más pequeños. Se trató de una ofrenda en forma de agradecimiento por escuchar las inquietudas de los jóvenes y el impulso para "cambiar el mundo".

Por su parte, el presidente del Comité Pontificio para la Jornada Mundial de la Infancia, el padre Enzo Fortunato, expresó su apoyo al sumo pontífice en nombre de la comunidad cristiana: "Estamos todos con usted para proteger la más importante reserva de amor, esperanza y vida".

La Iglesia Católica y las infancias en tiempos de guerra

El vicepresidente del Comité Pontificio, Aldo Cagnoli, afirmó que "vivimos tiempos de gran agitación, especialmente por las guerras que ven a los niños como víctimas".

Por ello, el referente eclesiástico invitó a los fieles a rezar y a realizar acciones que "enorgullezcan al niño que hay en cada uno".

"Los jóvenes son signos de esperanza en la sociedad, miran al futuro, abrumados por la falta de trabajo y oportunidades que destruyen los sueños", criticó el papa Francisco.

El referente eclesial destacó que "matar a los más pequeños significa negar el futuro". Además, mencionó el daño que causa la droga en la juventud, convirtiéndolos en "rehenes de bandas criminales".

Fuente: ShutterstockRiccardo De Luca - Update

Finalmente, el mandatario religioso abordó el problema de la infancia con cifras que consideró alarmantes:

  • 40 millones de niños desplazados por los conflictos,
  • 100 millones no tienen hogar,
  • 170 millones de niños víctimas de trabajos forzados, trata, abusos y explotación, incluidos matrimonios forzados.