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La página oficial del Vaticano compartió este miércoles una reflexión del Papa Francisco que invita a los fieles a profundizar en su relación con Dios. En su mensaje, el Papa enfatiza la importancia de permanecer en el amor de Cristo, afirmando: "Permaneced en mí, en mi amor". Este llamado a la permanencia resalta la necesidad de estar unidos a Él y experimentar su amor.

El Santo Padre también destaca que el acto de permanecer es fundamental, ya que nos permite recibir el amor divino antes de actuar. "Guardad mis mandamientos" es un imperativo que sigue a la invitación de permanecer, pero el Papa aclara que el primero es el más esencial: "Permanecer" en el amor de Dios.

Francisco subraya que el cristianismo no se basa en un moralismo estricto, sino en la relación que tenemos con Dios. "No somos nosotros quienes debemos producir el gran fruto", señala, enfatizando que el amor de Dios precede a nuestras acciones. La ética cristiana, según el Papa, es una consecuencia de nuestro ser en Cristo.

Finalmente, el Papa Francisco invita a los fieles a agradecer a Dios por el don de una nueva identidad. "Ya no es una obediencia, algo exterior, sino una realización del don del nuevo ser", concluye, recordando que nuestra acción debe fluir de esta nueva realidad en Cristo.

La lectura del Evangelio para este miércoles, 14 de mayo de 2025

El 14 de mayo de 2025, el Papa Francisco centró su reflexión en la lectura del Evangelio de Juan, donde se destaca la importancia del amor y la unidad entre los creyentes. En este pasaje, Jesús habla a sus discípulos sobre el mandamiento del amor, enfatizando que "este es mi mandamiento: que se amen unos a otros, como yo los he amado". Este mensaje resuena profundamente en la comunidad cristiana, recordando a todos la esencia del mensaje de Cristo.

Además, el Papa subrayó la necesidad de permanecer en la fe y en la comunión con Dios. En el mismo contexto, Jesús dice: "Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y les será hecho". Este versículo invita a los fieles a cultivar una relación íntima con Dios, asegurando que la oración y la fe son fundamentales para la vida espiritual.

Finalmente, el Papa Francisco concluyó su reflexión recordando que el amor y la unidad son esenciales para la misión de la Iglesia. Al citar: "En esto conocerán todos que son mis discípulos, si se aman unos a otros", el Papa instó a los cristianos a vivir en armonía y a ser testigos del amor de Cristo en el mundo. Este llamado a la acción es un recordatorio poderoso de que la verdadera fe se manifiesta en el amor hacia los demás.