En los últimos días, los bonos argentinos vivieron un verdadero terremoto. ¿Cuánto rinden? ¿Estamos peor que Rusia y Ucrania? La derrota de La Libertad Avanza (LLA) en la Provincia de Buenos Aires, donde Fuerza Patria se impuso con el 47% de los votos y una ventaja de 13 puntos, fue el disparador de un cambio en las expectativas del mercado. En este contexto, los bonos argentinos marcaron mínimos del año. Veamos el GD35: Ya venían de caer 13% desde los máximos de mayo hasta el día previo a las elecciones. Y el lunes posterior la caída fue del 10% en tan solo un día. Aunque vale destacar que, desde el mínimo del lunes, el precio se recuperó 12%. Pareciera que se disipó un poco el terror. ¿Ya somos "peores" que Rusia y Ucrania? Comencemos por Rusia: Los bonos rusos a 10 años rinden 13,7% ahora, luego de arrancar el año en niveles superiores al 16%. ¿Y Ucrania? Los bonos ucranianos a 10 años rinden 15,8%, por encima de los de Rusia. Es decir, el mercado le asigna mayor riesgo. ¿Y Argentina? ¿Estamos mejor, peor o igual que estos países que están en guerra? Argentina rinde más que Rusia (mayor riesgo) y prácticamente lo mismo que Ucrania. Esto no es casualidad. El resultado electoral fue leído por Wall Street como un aumento directo en el riesgo político y, sobre todo, en la probabilidad de que el kirchnerismo vuelva al poder. Para el mercado, esa posibilidad vale mucho más que cualquier dato macro: hoy los precios reflejan más miedo que fundamentos. Hoy la curva refleja un escenario de alto riesgo de reestructuración: no es que el default sea inminente, pero el mercado ya empezó a ponerle precio a esa posibilidad. La paradoja es que, con la curva corta rindiendo casi 20% (el AL30, por ejemplo), Argentina vuelve a estar en niveles históricamente atractivos para inversores que creen que el gobierno puede dar vuelta la elección o estabilizar el frente macroeconómico. Si esos supuestos se cumplen, los bonos pueden dar retornos extraordinarios. Pero si el escenario se complica, los precios de hoy seguirían luciendo "caros", a pesar de la fuerte caída. Una buena señal: el dólar no subió con fuerza (tal como se esperaba) y el gobierno no tuvo que intervenir. Eso es el mercado creyendo en el programa económico, por lo menos de manera inicial. Otra buena señal: los bonos y las acciones se están recuperando desde el mínimo del lunes, mientras que el dólar sigue tranquilo. El foco ahora pasa por octubre. Aunque LLA todavía tiene margen para recuperarse en octubre, incluso un eventual triunfo podría no ser suficiente para reabrir el acceso al financiamiento internacional, sobre todo después del buen desempeño del kirchnerismo en la Provincia. Faltan varias semanas y todo puede pasar, esa es la realidad. Los precios de los bonos hoy reflejan miedo, pero también una oportunidad para quienes confían en que el gobierno puede estabilizar el panorama político y económico. La elección definirá si estos niveles son una trampa mortal o una oportunidad histórica. Cada cual sabrá elegir. Perfiles conservadores, mejor abstenerse, ya que lo que es seguro es que habrá mucha volatilidad. Nota: el material contenido en esta nota NO debe interpretarse bajo ningún punto de vista como consejo de inversión o recomendación de compra o venta de un activo en particular. Este contenido tiene fines únicamente educativos y representa únicamente una opinión del autor. En todos los casos es recomendable asesorarse con un profesional antes de invertir.