El Gobierno anunció, en el marco de las medidas para fortalecer las reservas, que se eliminarán los plazos mínimos de permanencia para inversores no residentes. Si bien hubo advertencias por el riesgo macroprudencial, el Gobierno rechaza ese escenario. La entidad monetaria informó que se eliminarán los plazos mínimos de permanencia para no residentes que inviertan a través del mercado libre de cambios (MLC) o en colocaciones primarias del Ministerio de Economía con vencimientos superiores a seis meses. El titular del Banco Central, Santiago Bausili, agregó que el plazo de permanencia de seis meses se volvía costoso y resultaba un obstáculo para los inversores externos. "No había nadie relevante atrapado (por el cepo) en Argentina que quisiera salir y no podía. Sin embargo, las medidas de ese cepo hicieron que nadie tenga incentivos para entrar, porque pensaban ‘si no voy a poder salir o si me va a costar mucho hacerlo, no tengo incentivo para entrar'", explicó el funcionario. En esa línea, agregó que hace unas semanas empezó la flexibilización de ese cepo, "siempre en un marco para preservar el equilibrio macroprudencial". "No nos interesa el capital especulativo de corto plazo", dijo Bausili y explicó que la flexibilización de las restricciones se hizo para generar incentivos a que los inversores extranjeros entren con fondos financieros frescos y que puedan salir a los 6 meses. Sin embargo, el interés por los instrumentos del Tesoro, que son de mayor plazo, hizo que la restricción de los 6 meses entre en contradicción con la intención de que estos inversores tomen deuda del Tesoro. "Evaluamos los riesgos macroprudenciales y nos parece que están dadas las condiciones para avanzar en la liberación y vamos a flexibilizar las condiciones para inversores extranjeros que quieran entrar y salir de Argentina, siempre que participen en instrumentos que tengan por lo menos seis meses de plazo", concluyó el funcionario. La medida suscitó críticas sobre los riesgos que podía implicar este cambio en el plazo mínimo de permanencia. El diputado Martín Tetaz sostuvo que el plazo para inversiones financieras especulativas son "un estándar de regulación macroprudencial en el mundo" y agregó: "Huele a desesperación por un flujo de dólares que permita sostener el déficit de la cuenta corriente, sin ajuste del tipo de cambio: 100% de populismo, 100% electoral". "Esta medida apunta a maximizar los flujos por la cuenta financiera en la segunda mitad del año, cuando la estacionalidad negativa del comercio exterior y del turismo y la dolarización de carteras del retail en la víspera de la elección podrían presionar al alza al tipo de cambio", explicaron desde Portfolio Personal de Inversiones (PPI). Para Adcap, esto coincide con la expectativa de que el Gobierno siga atrayendo a inversores internacionales, "replicando la reciente emisión del bono Bonte 2030". El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, explicó que en el mundo desde la pandemia no hay prácticamente flujos a mercados emergentes y que ya no se usan medidas como la del plazo de parking. "Son prácticamente un mini cepo que ahuyenta a inversores globales. La manera de que no sean un problema macro es tener una macro ordenada como la que tenemos", dijo el funcionario y agregó: "Cero olor a desesperación por nuestra parte, puede haber sí, cierto olor a querer instalar un tema de tu parte". Fuentes del Ministerio de Economía explicaron a El Cronista que esta decisión no supone un riesgo macro ya que hay superávit fiscal, un tipo de cambio flotante por lo que si se dolarizan no es contra las reservas del Banco Central, los bonos que son demandados tienen una duration mayor a un año, por lo que la restricción de seis meses se vuelve irrelevante. Por último, la entrada de capitales está destinada a refinanciar vencimientos de capital, lo que no implica un incremento de la deuda.