El Banco Central tendrá que incrementar el volumen de emisión monetaria para comprar los dólares que liquidarán los agroexportadores bajo el nuevo tipo de cambio diferencial para las economías regionales, lo que ejercerá mayores presiones sobre la escalada inflacionaria por la que atraviesa la economía local y sobre la plaza cambiaria no oficial.

La autoridad monetaria se encargará posteriormente de absorber parte del exceso de liquidez, pero el excedente de pesos generará más expansión de la Base Monetaria. Por ende, presiones renovadas sobre los precios y el dólar, tal como ocurrió en las ediciones anteriores de esquemas cambiarios sectoriales.

Ayer, el Central emitió otros $ 18.000 millones para hacerse de u$s 61 millones netos de los u$s 68 millones que ingresaron a través del esquema cambiario para el complejo del agro. Así, acumuló casi $ 39.000 millones en las dos primeras jornadas con la nueva cotización del programa de incentivo exportador.

Los analistas de Aurum Valores calculan que, en caso de que se liquiden los montos previstos (hasta u$s 2500 millones), la emisión monetaria bruta que realizaría el Central para sostener la compra de esas divisas, sin contar la absorción por las ventas, estaría alrededor de los $ 850.000 millones, lo que implica cerca del 14% de la Base Monetaria.

Sin embargo, si se mantiene el ritmo de venta diaria de yuanes para abastecer a la demanda de divisas por parte de los importadores en el mercado oficial de cambios, sumado a lo que podría vender en moneda estadounidense, la emisión neta se ubicaría en torno a los $ 319.000 millones, que representa el 5% de la Base Monetaria.

Facimex Valores prevé que al mercado oficial de cambios ingresarán alrededor de u$s 2000 millones por parte del sector maicero y, en caso de que continúen liquidando a un ritmo similar al que lo han estado haciendo en las últimas semanas, unos u$s 400 millones adicionales del resto de las economías regionales hasta finales de agosto.

Sin embargo, calcula menores cifras para la emisión de pesos en términos netos. La financiera estima que el impacto monetario expansivo se ubicaría cerca de los $ 130.000 millones, teniendo en cuenta la diferencia sobre los montos que estima que el Central emitirá para comprar divisas y absorberá tras vender reservas en el mercado.

Romano Group espera que el Central logre retener alrededor del 70% de los dólares que ingresarán a través del esquema y la mirada estará puesta principalmente sobre el sector del maíz, que tiene mayor potencial en los montos de liquidaciones debido a los volúmenes acumulados y la ampliación del cupo exportable.

Los analistas advierten que, si bien la emisión monetaria luce menos negativa cuando su objetivo es la compra de dólares (en comparación con otros destinos, como el financiamiento del déficit fiscal), ejercerá nuevas presiones sobre la escalada inflacionaria argentina y sumará, a la vez, más tensiones sobre el mercado cambiario paralelo.