En mayo crecieron 56% interanual los consumos con tarjeta en el exterior, al pasar de u$s 385 millones en mayo del año pasado y llegar a u$s 602 millones en mayo de este año. Si en julio crecen igual, un 56%, significaría que pasen de u$s 438 millones en julio pasado a u$s 683 millones en julio de este año. De esta forma, estarían superando el récord hasta ahora en la gestión del presidente Javier Milei, de u$s 678 millones en febrero pasado, y alcanzando una cifra tan elevada que no se veía desde febrero de 2018, cuando se habían gastado u$s 752 millones con dólar tarjeta, aunque nada quiere decir que los viajes a Chile, Brasil, Uruguay y Estados Unidos estas vacaciones de invierno no lo superen. La cifra que se gastará sólo con tarjeta en el exterior durante estas vacaciones de invierno será casi nueve veces más que los u$s 80 millones que se habían consumido en julio de 2021. Desde el Banco Central alientan a que todos estos consumos no se paguen en pesos, para evitar el 30% de retención de ARCA, que implica un dólar de $ 1566,50, sino con divisas, que así se hace el 60% de los consumos. Por un lado, para que no se sacrifiquen reservas del Banco Central y, por el otro, para que salga más barato, ya sea comprando dólares oficiales a $ 1195, blue a $ 1210. O, en el mejor de los casos porque hoy es la cotización más barata, MEP a $ 1194, aunque en este último caso hay que agregarle el 1% de comisión por la compra venta de bonos, por lo que terminará costando igual que el oficial, de $ 1205, aunque este el precio de $ 1195 es el del Banco Nación, ya que las demás entidades lo suelen tener más caro, a un promedio de $ 1203 según el relevamiento del Banco Central. El tema es que si los ahorristas salen a comprar más dólares, ya sea en el oficial, en el MEP como en el blue, provocará una suba en el tipo de cambio, que puede tener un impacto en la inflación. Por otra parte, en julio habrá menos oferta de dólares desde el sector agroexportador, ya que estamos en la cuenta regresiva, pues esta es la última semana completa, más el próximo lunes 30, antes de que las retenciones a la soja, el maíz, el girasol, el sorgo y sus derivados regresen a los niveles de mediados de enero, previos a la baja temporal. A partir del martes 1° de julio, la alícuota para la soja subirá del 26% al 33%, y la del maíz del 9,5% al 12%, por ejemplo. En este contexto, lo esperable sería que el agro acelere el ritmo de liquidación en el MULC, según destacan los analistas de PPI. Para tener referencia, desde el 21 de mayo, cuando se anunció la prórroga de la baja temporal de retenciones al trigo y la cebada, y por complemento, la ratificación de la vuelta de las retenciones para el resto de los cultivos, la liquidación del sector promedia unos u$s 180 millones diarios. Aunque, la semana pasada, excepcionalmente corta por dos feriados locales (lunes y viernes) y uno estadounidense (jueves), este promedio cayó a u$s 150 millones diarios. La gran incógnita ahora pasa por el tipo de cambio. La pregunta clave es cómo reaccionará al flujo de oferta del agro en estos últimos días hábiles de junio en los que todavía las retenciones permanecerán bajas para todos los cultivos. "La única certeza que tenemos es que a partir del 1º de julio, desde el lado de la oferta, habrá una merma significativa del agro, el principal complejo exportador", concluyen los analistas de PPI.