El mercado de deuda soberana culminó la jornada de este jueves con un balance general de precios a la baja, después de una sesión caracterizada por la volatilidad y la reversión de las ganancias iniciales. Así, el impulso alcista que se había generado en las primeras horas se desvaneció hacia el cierre y dejó a los bonos con variaciones diarias que contrastaron fuertemente con las registradas a mitad de la sesión, por ejemplo. El segmento de bonos bajo Ley Extranjera fue el más afectado por esta reversión, ya que cerraron con caídas generalizadas. Los títulos de tramo medio y largo, que suelen ser sensibles al riesgo, revirtieron totalmente sus avances. El Global 2035, que cayó -1,2%, y el Global 2046, con una pérdida de -0,9%. Solo los Globales de corto plazo, como el Global 2029, lograron cerrar en terreno positivo, aunque con una suba muy moderada del +0,9%. En cuanto a los bonos bajo Bonares, la tendencia fue más dispar. Si bien el Bonar 2030 cerró con una suba del +0,9% y el Bonar 2029 avanzó un +0,6%, estos incrementos representan una desaceleración drástica respecto a las ganancias que habían registrado a mitad del día. La nota negativa se la llevó el Bonar 2038, que mantuvo la fuerte corrección y finalizó con la mayor caída de la jornada, un -5,1%. El mercado quedó a la espera de otro tuit de Scott Bessent, secretario del Tesoro, a pesar de que hubo otra compra de pesos, no se retomaron las voladuras. Esto parece que se vuelve una constante. Algo así escribió este jueves la consultora 1816, que tituló su informe "A la espera del próximo tuit". Hacia adelante, dice, la sostenibilidad del régimen cambiario depende exclusivamente de la continuidad del apoyo estadounidense. La consultora reconoce que, incluso con el peso apuntalado por el "put de Bessent", fue necesario que las tasas a un día alcanzaran los tres dígitos para que el CCL siga por debajo de $ 1500 y que la nueva compra de pesos de EE.UU. de ayer no evitó que la moneda se deprecie 1,5% en la rueda. Este jueves, las tasas de caución a un día rondan el 75%. Parecería, en definitiva, que nada alcanza a disuadir a los inversores sobre la necesidad de un tipo de cambio más alto o un nuevo esquema cambiario. Las acciones argentinas que cotizan en Wall Street también cayeron más de 3 por ciento. Lideró la baja Edenor (-3,6%); Ternium (-2,8%); y Central Puerto (-1,9%). En la plaza local, el S&P Merval mantuvo la nota positiva. Escalaron con fuerza Ternium (+4,7%); Aluar (+4,6%) y Telecom (+4,2%). Tal como recuerda Portfolio Personal de Inversiones (PPI), entre las noticias corporativas, varias compañías locales continúan con la recompra de acciones propias. En detalle, Central Puerto (CEPU) informó la adquisición de 295.000 acciones a un precio promedio de $1421,7 por papel, por un monto total de $419 millones. En la misma línea, Banco Macro (BMA) compró 21.107 acciones clase B a un valor promedio de $ 7426,3, por un total de $157 millones. Por otro lado, el mercado primario de deuda corporativa sigue activo. "Hoy será el turno de Pan American Energy, que licita una nueva ON hard dollar a 18 meses. Estimamos que su cupón podría ubicarse cerca de 6%. El lunes llegará el turno de John Deere Credit, que reabrirá su serie HJCIO a 2027, con una TNA de 7,5% y un precio de emisión sujeto al resultado de la licitación", concluye el broker.