Esta semana arranca la temporada fuerte de balances para las empresas del S&P Merval y el mercado vuelve a mirar los números con lupa. Si bien algunas ya rindieron examen ante el mercado hace unos días, hasta mediados de diciembre, una treintena de compañías argentinas presentará sus resultados del tercer trimestre. En un contexto de reacomodamiento económico y expectativas políticas todavía frágiles, los informes corporativos vuelven a convertirse en el termómetro clave para medir la salud del sector privado y detectar oportunidades selectivas en la plaza porteña. El contexto no puede ser más desafiante. Octubre dejó un hito para el equity local: el S&P Merval trepó 74,5% en dólares -su mejor desempeño mensual histórico- y volvió a superar los u$s 2000, impulsado por el resultado electoral favorable para el oficialismo que reposicionó las expectativas del mercado. El rally, que incluyó una suba récord del 31,2% el lunes posterior a la contienda electoral, se sostuvo durante toda la semana con avances generalizados en acciones líderes. Desde el plano técnico, el índice quebró su media móvil de 200 días, señal de un posible cambio de tendencia, mientras que en lo fundamental el impulso provino de sectores dinámicos, mayor acceso al crédito y el regreso de flujos externos. "Pese al fuerte repunte, el S&P Merval aún cotiza 6,2% por debajo del cierre de 2024 y 16,1% de su máximo histórico, lo que deja margen para nuevas alzas si el contexto acompaña", recuerdan desde Portfolio Personal de Inversiones (PPI). Desde el Grupo Invertir en Bolsa (IEB) señalaron que, al analizar la correlación entre el S&P Merval medido en dólares y los niveles de riesgo país durante la gestión de Javier Milei, las acciones argentinas aún se encuentran subvaluadas respecto de la deuda soberana. Por ese motivo, consideran que todavía queda potencial de suba para el equity, "especialmente tras el fortalecimiento político del oficialismo, que le permite avanzar con sus reformas y generar un impacto positivo sobre la economía real". En este contexto, IEB también anticipa un efecto de las menores tasas durante el trimestre sobre los márgenes financieros (NIMs) y los retornos sobre el capital (ROEs). Por ello, la entidad decidió quitar a Grupo Supervielle (SUPV) de su cartera y reducir la ponderación de Grupo Financiero Galicia (GGAL) y Banco Macro (BMA). En paralelo, también disminuyó la exposición al sector Oil & Gas, y llevó la posición de Vista Energy (VIST) al 15%, con el objetivo de adoptar una postura más defensiva frente a la temporada de balances. Como contracara, IEB consideró oportuno incrementar posiciones en el sector regulado a través de Transportadora de Gas del Norte (TGNO4), EcoGas (ECOG) y Transener (TRAN), al estimar que la victoria del oficialismo en las elecciones de medio término garantiza flujos estables y tarifas regularizadas para los próximos años. Esto se puede interpretar como que el reconocido bróker anticipa balances flojos o, al menos, sin catalizadores positivos para el sector financiero en el corto plazo. En cambio, reorientan la estrategia hacia sectores más defensivos y con ingresos regulados, como energía y transporte. Matías Waitzel, socio en AT Inversiones, en diálogo con El Cronista, señaló que YPF y Pampa Energía se perfilan como las grandes protagonistas del panel líder en esta nueva temporada de balances. Waitzel explicó que la recuperación en los niveles de producción y la tendencia favorable en los precios internacionales de los hidrocarburos consolidan un panorama alentador para ambas compañías. No obstante, el analista sostuvo que si bien la volatilidad suele intensificarse durante los períodos de publicación de balances, "este contexto podría convertirse en una oportunidad para los inversores que apuestan por los fundamentos sólidos y las perspectivas de crecimiento del sector energético argentino", comentó. Así, de cara a esta semana, y tras un rally que quedará en los libros del mercado, la atención vuelve a centrarse en cómo se reacomodarán las acciones hacia el cierre del año. Al mismo tiempo, recordó el bróker, el mercado local ingresa en plena temporada de balances, que con el panorama político más despejado podría convertirse en el principal driver de la renta variable para los próximos meses.