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Un reciente hallazgo científico iluminó uno de los fenómenos más fascinantes del Atlántico Sur: el alucinante color turquesa de las aguas que rodean a las Islas Malvinas.
Gracias a imágenes obtenidas desde el espacio, investigadores y científicos de la NASA identificaron la causa de este fenómeno natural, que ahora se considera un indicador positivo respecto de la salud del océano y el impacto del cambio climático.

Este descubrimiento fue posible gracias a sensores del satélite del proyecto PACE, que capturaron imágenes de una amplia zona de la plataforma continental. Desde el espacio, los científicos observaron una asombrosa paleta de colores que despertó el interés de la comunidad científica internacional por la variación en los tonos del agua marítima.
¿Qué halló la NASA en las aguas que circundan las Islas Malvinas?
Lo que parecía una simple postal paradisíaca es, en realidad, una floración masiva de fitoplancton, millones de microorganismos fotosintéticos que flotan en la superficie del océano.
Esta concentración, imperceptible a simple vista desde la costa, solo puede observarse mediante tecnología satelital avanzada, como la que usa la NASA para este tipo de investigaciones y proyectos de semejante magnitud.

Estas floraciones permiten analizar el estado de los océanos, su biodiversidad y su evolución ante el cambio climático. Por eso, el área será vigilada en los próximos años, ya que brinda datos clave sobre los ecosistemas marinos del hemisferio sur.
¿A qué se debe el color del agua de las Islas Malvinas?
El tono turquesa característico que se observa en las aguas malvinenses proviene de los cocolitóforos, un tipo de fitoplancton cubierto de carbonato de calcio. Esta capa refleja la luz solar, tiñendo el agua de un color brillante que varía entre el turquesa y el verde esmeralda.
Por qué cambia el color del agua marítima
Cerca de la costa, el color del agua se torna más opaco por la presencia de sedimentos. Sin embargo, mar adentro, donde la floración es más intensa, el brillo se potencia, lo que sugiere una concentración de organismos aún mayor de la estimada previamente.













