

En esta noticia
- No es la dieta ni más ejercicio: este es el cambio que Harvard recomienda para mejorar el rendimiento en el gimnasio
- Qué dice la investigación de Harvard sobre el cambio de hábito para mejorar el rendimiento físico
- Por qué dormir temprano mejora el rendimiento, según Harvard
- Sueño: qué recomienda Harvard para obtener un buen descanso
La pregunta más común a la hora de iniciar el gimnasio es cuánto tiempo tardará el cuerpo en mostrar resultados, ya sea ganar musculo,bajar peso o mantenerse en forma.
Se trata de una serie de objetivos que sirven para potenciar la motivación y las ganas de entrenar, en donde la forma en cómo planificamos nuestro entrenamiento y alimentación es fundamental.
Si bien la gran mayoría suele enfocarse en la dieta o una mayor exigencia de los ejercicios, especialistas de la Universidad de Harvard revelaron en un estudio reciente que basta con un simple cambio en nuestra rutina diaria para obtener mejores resultados en el gimnasio.
No es la dieta ni más ejercicio: este es el cambio que Harvard recomienda para mejorar el rendimiento en el gimnasio
En detalle, los expertos aseguran que acostarse temprano y dormir bien funciona como un auténtico impulsor corporal, con la capacidad de mejorar notablemente la efectividad de cualquier programa de entrenamiento físico.
Los investigadores ponen el foco en la calidad y el horario del sueño, un enfoque que no solo permite recargar energías sino que tiene un impacto directo en nuestra capacidad de entrenamiento y recuperación muscular.
De esta forma, este descubrimiento respaldado por la ciencia puede modificar por completo las estrategias de descanso para quienes buscan optimizar su rendimiento físico.

Qué dice la investigación de Harvard sobre el cambio de hábito para mejorar el rendimiento físico
Para esta investigación, analizaron a un grupo de personas físicamente activas con el objetivo de observar el vínculo del descanso nocturno con la actividad física frecuente e intensa.
Fueron divididos en dos grupos: uno adelantó el horario de dormir, mientras que el otro mantuvo su rutina habitual, aunque todos contaron con la misma cantidad de horas de sueño.
Al día siguiente, todos los participantes realizaron sesiones de entrenamiento con niveles moderados y altos de exigencia física. De acuerdo a lo que publicó GQ, aquellos que se acostaron más temprano lograron mayor resistencia al entrenar durante la semana, con mayor energía y mostrando una mejor recuperación muscular.
En cambio, aquellos que mantuvieron su hora habitual de acostarse, aunque durmieran lo mismo, mostraron menos motivación y más dificultades para sostener el ritmo de entrenamiento.

Por qué dormir temprano mejora el rendimiento, según Harvard
Los expertos sacaron la conclusión de que dormir temprano facilita la disponibilidad de horas diurnas para entrenar con luz natural, mejorando así la predisposición física y mental.
Otro factor positivo es que mejora la calidad del descanso profundo, lo que a su vez favorece la regeneración muscular. También disminuye la sensación de fatiga durante el día, factor clave para reducir el riesgo de lesiones.
Como último elemento destacado, advierten que dormir menos de seis horas por noche no solo afecta el rendimiento físico, sino que debilita el sistema inmune, disminuye la concentración y perjudica el estado de ánimo.
Sueño: qué recomienda Harvard para obtener un buen descanso
Los expertos de Harvard aconsejan dormir entre siete y nueve horas cada noche, una recomendación ideal tanto para atletas como para personas que simplemente desean mantenerse saludables.
Para quienes entrenan temprano, también sugieren adelantar el horario de acostarse para poder completar al menos siete horas de descanso. Acortar el sueño con el fin de ganar tiempo es perjudicial para aquellos que buscan mejoras permanentes en su rendimiento físico.
Si bien Harvard seguirá investigando estos vínculos, el consejo es sencillo: mantener un buen descanso tanto en horario como en duración impulsa las mejoras deportivas, reduce el riesgo de sufrir lesiones y ayuda a sostener la energía y el entusiasmo en la actividad física.














