
El magnate Elon Musk ha llevado su rivalidad con las grandes tecnológicas a los tribunales. Este lunes, sus empresas xAI y X Corp. presentaron una demanda antimonopolio contra Apple y OpenAI, acusándolas de formar una alianza ilegal para proteger sus monopolios en inteligencia artificial (IA) y bloquear la competencia, en particular a sus aplicaciones Grok y X.
La demanda, radicada en el Distrito Norte de Texas, expone que Apple manipula las clasificaciones en la App Store para impedir que las apps de Musk escalen en visibilidad, y retrasa deliberadamente actualizaciones de Grok en beneficio de ChatGPT, la aplicación de OpenAI integrada en iOS desde junio de 2024. Musk afirmó: "Apple se comporta de una manera que hace imposible que cualquier compañía de IA además de OpenAI alcance el número 1 en la App Store".
Este acuerdo exclusivo otorgó a OpenAI acceso preferencial a miles de millones de indicaciones de usuarios de iPhone, consolidando su posición dominante y obstaculizando la competencia, según la denuncia.

Elon Musk contra los "monopolios"
El texto de la presentación legal sostiene: "Esta es la historia de dos monopolistas que unen fuerzas para asegurar su dominio continuo en un mundo impulsado rápidamente por la tecnología más poderosa jamás creada por la humanidad: la inteligencia artificial".
Para Musk, su empresa desarrolla "superapps" que integran conectividad social, mensajería, comercio electrónico y entretenimiento sin depender de un solo dispositivo, un modelo que representa una amenaza directa al ecosistema cerrado que Apple mantiene.
La denuncia detalla: "Apple manipula las clasificaciones de la tienda digital para impedir que las apps Grok y X escalen entre las más visibles. También hay retrasos deliberados en las actualizaciones de Grok, en beneficio de la herramienta de OpenAI".

Pelea por el liderazgo en inteligencia artificial
En este enfrentamiento se pone en juego no solo el liderazgo tecnológico sino el acceso a los usuarios y la innovación en IA, con Musk buscando una compensación millonaria y una orden judicial permanente para detener lo que define como "prácticas anticompetitivas".
La respuesta de OpenAI fue crítica hacia Musk, calificando la demanda como parte de un "patrón continuo de acoso" por parte del empresario, mientras Apple prefirió no hacer declaraciones públicas hasta ahora.
Este caso abre un nuevo capítulo en la regulación y competencia en la inteligencia artificial, con un magnate que desafía a dos pesos pesados tecnológicos acusándolos de sabotear el ecosistema para mantener el control. La resolución podría marcar un precedente crucial para la industria y la forma en que las plataformas gestionan la visibilidad y competencia de aplicaciones.












