La baja de la inflación en lo que va del año trajo una novedad en las actualizaciones salariales. Por primera vez en mucho tiempo, las empresas empezaron a mirar el mérito de los colaboradores para otorgar incrementos de sueldo, que podrían sumar hasta 10 puntos adicionales a los aumentos que se otorgan para seguir el ritmo del incremento de precios. Y, aunque en 2025 bajó la cantidad de veces que las compañías realizan ajustes en las remuneraciones, la frecuencia sigue siendo alta, con una mayoría que lo hará en tres o cuatro ocasiones. Con un esquema que combina revisiones por desempeño y aumentos por inflación, resulta difícil conocer las bandas que se manejan en cada posición. De acuerdo con el reporte salarial de Randstad, los ejecutivos del sector petróleo, gas y minería se mantienen como los mejor pagos del país. En octubre de 2025, un CFO puede cobrar entre $ 12.700.000 y $ 23.800.000 mensuales brutos, según la región, con los valores más altos concentrados en Patagonia. En segundo lugar se ubican la banca y los servicios financieros, con remuneraciones que oscilan entre $ 13.500.000 y $ 23.900.000, impulsadas por la demanda de perfiles especializados en control de gestión, tesorería y planeamiento. El sector tecnológico también conserva una fuerte competitividad salarial. Los puestos vinculados a IT, ingeniería de software o dirección de tecnología igualan los rangos de energía y finanzas, impulsados por la escasez de talento calificado y la competencia con compañías extranjeras que pagan en moneda dura. En el extremo opuesto se ubican retail y servicios, con sueldos más moderados y menor diferencia por región. El estudio releva posiciones de nivel semisenior, senior y de dirección, y muestra una amplia dispersión según rubro y ubicación geográfica. Un director comercial percibe entre $ 9.200.000 y $ 22.700.000, mientras que un director de marketing gana entre $ 8.900.000 y $ 22.000.000. Para el cargo de director de operaciones, los valores van de $ 9.900.000 a $ 23.400.000, y los de Recursos Humanos, entre $ 8.700.000 y $ 22.100.000. En niveles gerenciales, las remuneraciones varían entre $ 5.500.000 y $ 13.000.000en administración y finanzas, y entre $ 4.000.000 y $ 8.800.000 en tesorería. En promedio, los directores perciben sueldos que duplican o triplican los de un gerente, mientras que los jefes cobran entre $ 3.000.000 y $ 6.500.000, dependiendo del puesto y la zona del país. Las diferencias regionales se mantienen marcadas. Buenos Aires y Patagonia continúan liderando en niveles de remuneración, mientras que NOA y NEA muestran las bandas más bajas. Un controller en la Patagonia puede ganar hasta $ 11.000.000, frente a $ 7.400.000 en Cuyo o el Litoral. Además del salario fijo, el documento resalta que los bonos por desempeño siguen siendo habituales, especialmente en posiciones de liderazgo. También se extiende el uso de beneficios no monetarios -home office, horarios flexibles, formación, cobertura médica premium y días libres adicionales- como herramientas de retención y motivación del talento. Aun con una economía que muestra señales de estabilización, el mercado laboral argentino continúa segmentado: las empresas compiten por perfiles clave en un entorno donde el mérito empieza a recuperar protagonismo frente a la inflación.