A tan solo 10 días del próximo fin de semana largo, muchos comienzan a calcular el presupuesto y decidir a dónde ir. Entre las opciones más elegidas aparece Mendoza, que además de concentrar gran parte de la producción vitivinícola del país, es un destino turístico muy solicitado por el enoturismo. La provincia reúne el 80% de la producción nacional de vino y el 93% de las exportaciones. En los últimos años, el enoturismo se transformó en uno de los motores de la economía en la provincia, al punto que el gasto promedio por visitante crece más que en otras actividades tradicionales. "El público argentino suele tener en cuenta factores como el precio, la financiación y el tipo de destino según el objetivo del viaje, ya sea descanso, negocios o en familia. Mendoza es uno de los lugares que más se eligen", explica Gustavo Bondoni, gerente de marketing de TIJE Travel Tech Group. Durante las vacaciones de invierno, el turismo dejó un ingreso estimado en $ 120.675 millones, con un gasto promedio diario de $ 80.000 por persona, según datos del Ente Mendoza Turismo (Emetur). Según TurismoCity, la mejor época para visitar la provincia es la primavera, de septiembre a noviembre, que muestra el inicio del ciclo de la vid, con las primeras flores y un clima que permite recorrer las bodegas al aire libre. El otoño es otra de las fechas más elegidas, que va de marzo a mayo, y está marcado por la vendimia. Es el momento de la cosecha y de las actividades que giran en torno al vino. Los vuelos parten desde Aeroparque hasta el Aeropuerto Internacional Gobernador Francisco Gabrielli, y duran un poco más de dos horas. En temporada de primavera, los precios se mueven entre $ 65.000 y $ 82.000. La opción más práctica suele ser alquilar un auto. Un Fiat Cronos para cinco personas en Hertz cuesta alrededor de $ 220.000 por cinco días, mientras que un Toyota Etios en "Secret Deal" ronda los $ 198.500. Rentacar ofrece un Nissan March para cuatro pasajeros a $ 203.300. En la mayoría de los casos, se puede retirar el vehículo directamente en el aeropuerto. La visita a bodegas es el gran imán turístico de Mendoza. En Alfa Crux, por ejemplo, la experiencia básica de 45 minutos cuesta $ 37.000 e incluye un recorrido por las instalaciones y degustación de tres copas de la línea CRUX. La opción "Visita y Degustación Estrella", de una hora, suma etiquetas de las líneas XTRA, BETA y ALFA a $ 72.000. Otra opción que ofrecen es "Lotes Históricos" incluye barrel tasting y vinos de más de 15 años por $ 180.000. Además, el restaurante de la bodega ofrece menús maridados con precios entre $ 150.000 y $ 275.000. Santa Julia, tiene una propuesta más variada y accesible. Las visitas a la bodega arrancan en $ 15.000 y a la planta de aceites "Zuelo" en $ 13.000. También se pueden sumar distintas experiencias como recorridos en bicicleta, ser cosechero por un día o clases de coctelería con Malamado. El ticket promedio de venta de vinos ronda los $ 41.000. Catena Zapata, otra de las bodegas más reconocidas, ofrece recorridos guiados con tarifas que van de $ 85.000 a $ 155.000 por persona, según la propuesta y la época del año. Una de las experiencias más reconocidas es "Enólogo por un día", que permite armar un blend propio con diferentes variedades de Malbec, Semillón y Chenin. Según el Observatorio Económico de Turismo del Vino, el año pasado más del 80% de las bodegas que recibieron turistas fueron micro y pequeñas empresas, una señal de que el enoturismo se expandió más allá de los grandes grupos vitivinícolas. Civitatis ofrecevisitas guiadas a varias bodegas con degustación tienen un valor aproximado de $ 70.000. También hay otro tipo de actividades como los circuitos de alta montaña -que incluyen Aconcagua, Puente del Inca y Uspallata- rondan los $ 119.000. También son muy elegidas las escapadas a Potrerillos y Cacheuta, con precios desde $ 70.200. También hay opciones sin costo por el centro histórico o la Mendoza colonial, que duran entre una hora y media y dos horas. En el último verano, la ocupación hotelera en Mendoza no superó el 50%, y parte de los visitantes usaron la provincia como paso hacia Chile. Sin embargo, en enero el Emetur contabilizó 374.000 turistas, con un nivel de ocupación del 62% que generó ingresos por $117 millones. La gastronomía es otro atractivo de la provincia mendocina, que en muchos casos acompaña a las visitas a bodegas y viñedos. En Angélica Cocina Maestra, dirigida por Juan Manuel Feijoo y Josefina Diana, ofrece un menú de siete pasos que van desde los $157.800 sin vinos hasta los $ 190.000 con maridaje. Otra opción es Riccitelli que ofrecen varias propuestas que van desde los $110.000 hasta los $220.000. En el otro extremo "El Capricho" propone un menú degustación de $ 65.000 por persona, con la posibilidad de sumar maridajes que van de $ 30.000 a $ 110.000. También aparecen otras opciones que no requieren un gran desembolso, como Bigalia, de Federico Ardito, que cuenta con pizzas napolitanas que van de $ 9000 a $ 28.000. Según "Viajar Viviendo", Chacras de Coria se distingue por su cercanía del centro y de Luján de Cuyo. Maipú presenta opciones más accesibles con conexión de transporte público. Otra zona que se destaca es Valle de Uco, que esta concentra la mayor parte de los alojamientos de lujo, uno de ellos es "Casa de Uco", que en primavera ronda los u$s 600 por noche. En hoteles céntricos, el alojamiento por cinco noches para dos personas, con desayuno incluido, se ubica entre $ 300.000 y $ 400.000. En Airbnb, casas en Maipú o Luján de Cuyo tienen precios que oscilan entre u$s 280 y u$s 600 para la misma cantidad de noches. Un poco más alejado se encuentra "La Morada Lodge", con cabañas para dos personas que rondan los u$s 190. Un viaje completo para dos personas, con vuelos en temporada media, alquiler de auto, cinco noches en un hotel, almuerzos y cenas en bodegas y varias experiencias de degustación, puede superar fácilmente el millón de pesos por persona. Si se apunta a un plan más económico, con hospedaje en el centro y experiencias básicas, la escapada puede costar entre $ 600.000 y $ 700.000. Sin embargo, hay formas de achicar el presupuesto, como optar por almuerzos fuera de las bodegas, elegir degustaciones más simples, hospedarse en el centro o compartir el alquiler de auto con varias personas son algunas de las estrategias que ayudan a alivianar los precios. La provincia sigue siendo uno de los destinos más elegidos del país. En las vacaciones de invierno de 2025 recibió alrededor de 120.000 turistas, principalmente de Buenos Aires, Córdoba y otras provincias. La estadía promedio fue de cuatro días con un gasto de $89.000 diarios por persona, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Durante los primeros cinco meses del año hubo una caída del 22% en la llegada de visitantes respecto de 2024, aunque la temporada de invierno logró revertir parte de la baja. También continúa el arribo de turistas internacionales, sobre todo desde Brasil, Uruguay y Chile. En mayo de 2025 se registraron 542.300 visitantes no residentes, en su mayoría ingresando por vía aérea.