

Havanna apuesta a extender el fenómeno Dubai. Tras el boom del alfajor de pistacho, que hoy representa un cuarto de sus ventas, la marca marplatense lanzó una tableta de chocolate con leche y relleno inspirado en la misma tendencia mundial. La estrategia busca reducir el impacto de la caída del consumo y mantener sus ventas en un contexto difícil, con un producto que debutó en aeropuertos y en tres locales del sur del país.
La producción de este nuevo producto es limitada, con una primera tanda de 8500 unidades, frente a los casi 2 millones de alfajores Dubai que ya comercializó la empresa del fondo Inverlat desde su lanzamiento en julio. La escasez y el precio del pistacho -insumo que Havanna compra en San Juan y La Rioja- condicionan la disponibilidad del producto, aunque la demanda inicial obligó a reponer stock en menos de 10 días.
La tableta se suma a la familia de productos inspirados en esta variedad, tras el éxito del alfajor. Según Martín Zalazar, gerente de Marketing de Havanna, el nuevo formato se diseñó, en principio, como un producto exclusivo para el canal travel retail. "Hoy, la tableta se consigue en Ezeiza, en Aeroparque y en nuestros tres locales del sur: dos en Bariloche y uno en San Martín de los Andes", detalló.
La empresa decidió limitar la distribución por la disponibilidad de insumos. El pistacho enfrenta precios volátiles y dificultades de abastecimiento. "Estamos comprando entre 25 y 30 toneladas al año, y hoy la tonelada nos cuesta entre u$s 25.000 y u$s 30.000. Hemos evaluado algunos proveedores extranjeros. Pero los tiempos y la calidad no nos permitieron avanzar. Todo tiene que ser muy inmediato y con el grano exacto que necesitamos", explicó Zalazar.
El producto, que se presenta en un formato de 150 gramos, con chocolate con leche y un relleno que replica la receta original de la tendencia Dubai, cuesta $ 21.000. Zalazar destacó que "en los aeropuertos, competimos con marcas globales como Lindt; este producto nos permite ofrecer una alternativa local con el mismo nivel de aspiracionalidad."
La empresa concentra su producción en su fábrica del Parque Industrial de Mar del Plata, donde elabora 30.000 docenas por día entre alfajores, conitos y galletitas. Emplea a 1200 personas de forma directa y 3000 de manera indirecta, a través de sus franquicias. Cuenta con 251 locales en el país y 247 en el exterior.
Havanna abrió sus puertas en 1948, de la mano de Demetrio Elíades, Benjamín Cisterna y Luis Sbaraglini. En 1997, Exxel Groupcompró la empresa por u$s 80 millones. Hasta que, por una crisis que derivó en una cesación de pagos, sus bancos acreedores se la vendieron en 2003 al fondo Desarrollo y Gestión (DyG), precursor de su accionista actual, Inverlat.
Más productos se suman a su cartera
Havanna ya evalúa su próximo lanzamiento y amplía su propuesta en café con la apertura de un local en Acassuso, que ofrecerá blends de origen y experiencias de especialidad certificadas por la Specialty Coffee Association (SCA).
Ahí se encontrará el Jacu Bird Coffee, un café brasileño poco común que se produce en la fazenda Camocim, en Espírito Santo (Brasil).
La empresa firmó un acuerdo de exclusividad con la finca para traer este café a la región. La preparación se hace con molienda y filtrado en el momento, demora entre 10 y 15 minutos y se ofrece a $ 37.000.
Otra de las novedades es el Ngorongoro, cultivado en Tanzania. "La idea es ir rotando orígenes a lo largo del año para invitar a los clientes a recorrer el mundo del café", explicaron en la empresa.













